No más santuario. 🧚‍♂️

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Todos intercambiaron la información que tenían sobre los otros desaparecidos. Maggie aún tenía esperanza de recuperar a Bella.

Empezaron a fabricar armas con lo que tenían y podían.

ey, cuatro de los desgraciados vienen hacia acá

Avisó Daryl, que miraba por una grieta que había entre las maderas.

– todos saben qué hacer, primero a los ojos, luego a la garganta

Dijo Rick, todos se prepararon cerca de la entrada, listos para atacar.

pongan la espalda contra uno de los extremos del coche! Ahora!

Se escuchó desde afuera. Escucharon algo abrirse, pero no fue la puerta.

hola!

Dijo Annie con una sonrisa mirando el techo, una puerta, que hasta el momento no habían visto, se abrió y algo cayó al piso.

– FUERA!

Gritó Abraham y todos se tiraron antes de que el aparato explotara.

Salió mucho humo, Regulus y Luke sabían de que se trataba esa bomba, ya que ambos habían hecho muchas parecidas.

Mientras todos tosían la puerta se abrió, y de ahí se llevaron a un par de personas, todos hombres.

Tenían una tela en la boca, y las manos atadas en la espalda. Los tobillos también estaban atados.

A todos los arrodillaron frente a una bañera gigante de metal. Rick y Daryl fueron los que más fuerza ejercieron, intentándo librarse, Regulus solo se dejó guiar tranquilo.

Alrededor había gente cortando cuerpos con cierras automáticas...se los iban a comer.

En total eran Bob, Rick, Daryl, Regulus y Glenn. Pero también habían otros cuatro hombres.

Detrás de ellos había un hombre con un bate, y otro con cuchillos. Ellos tomaban el papel de "carniceros".

Fueron hacia el extremo contrario, era un chico jóven y de cabello teñido. Le dieron un batazo en la nuca y el carnicero cortó su garganta.

Toda la sangre comenzó a caer por la bañera, era simplemente desagradable. Algunos gritaban por su vida, otros intentaban no desmayarse.

Rick volteó a mirar a Regulus y el hombre muy tranquilo le sonrió, a pesar de la tela en su boca, era la primera vez que lo veía sonreír.

Con el segundo hicieron lo mismo...cada vez estaban más cerca. Y el tercero, pero antes de ir por el cuarto, Gareth entró.

hola, ¿cuántas balas dispararon?

– treina y ocho

Dijo el del bate mientras le rompía la cabeza al cuarto. El siguiente era Glenn...

El del bate se posicionó y estuvo a punto de matarlo.

– ey!, ¿cuántas disparaste?

– demonios, lo lamento...es mi primer rodeo

Dijo el de los cuchillos, Gareth agarró su frente cansado.

después de que termines aquí, ve a tu puesto y cuenta los casquillos. Kaylee no los recogerá hasta mañana

– ey! Déjame hablar contigo!

Dijo Bob a pesar de la mordaza en su boca.

¿son cinco del A y cuatro del D? – preguntó Gareth

Mi dulce fantasía P.2 [Daryl Dixon] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora