Cafuné. - Lawlu.

cafuné 24.

Liverpool, Inglaterra. Trafalgar D. Water Law.

— ¿¡QUÉ MIERDA TE PASA!? — gritaba Katakuri mientras cogía de la chaqueta a Law.

— ¡Suéltame! — se liberó de un golpe directo a la mejilla del contrario.

Salió corriendo de la mansión de los Charlotte, no podía decir nada más, tampoco llorar, un algo le impedía sentir.

¿Hace cuánto que no lo ataca ese tipo de cosas? Ese algo que en su niñez y parte de su vida adulta no lo acompañó de la mejor manera, atormentando sus días y demás.

Su teléfono estaba lleno de llamadas perdidas de Corazón, no tenía las ganas ni las fuerzas de contestar, menos con las palabras del único que creyó que lo quería de verdad, resonando como si tuviera un amplificador en el cerebro.

Seguía corriendo por las calles vacías por la oscuridad de la noche. Liverpool era una gran ciudad, pero hay ciertos pueblos que le rodean, los cuales no son tan habitables, pero había gente que vivía allí porque no tenía el dinero suficiente, o también millonarios con cojones de oro para hacerse una mansión allí, dándole trabajando a los civiles para el hogar.

Se sentía ido, con las defensas en los suelos, era la oportunidad perfecta para ser asesinado, sobre todo con un enemigo mirando desde las sombras.

— Trafalgar, no puedes irte así, ¿Qué sucedió? — era Kid acompañado con Sanji detrás, preocupados por el chico.

Este no dijo nada, solo se dejó llevar de los hombros por sus cercanos hasta un bar cerca de allí.

Lo sentaron en la barra, con ambos hombres cuerdos a sus lados.

— ¿Qué pasó en Oxford? — insistía el pelirrojo.

— Ps, trae whisky. — ordenó el rubio a unos de los meseros del lugar, mientras encendía un cigarro.

Este se les fue dado por la casa, porque sabían quiénes eran ellos, sin embargo, no lo hacían por miedo, los de ese pueblo, en especial los pobres, les debían la vida a los revolucionarios. Eran saqueados con frecuencia antes que ellos llegaran, compartiendo dinero y otras cosas más, se podría decir que los líderes de la revolución protegían esa zona, a cambio, los cuidados se quedaban callados con su paradero.

Era contradictorio, ya que anterior Law pateó a una mujer del pueblo, pero era porque esa era drogadicta, y probablemente una posible traidora.

— Pasó algo con Luffy, ¿No? — soltó libremente Sanji, sabiendo perfectamente sin preguntar de hecho.

El hombre afectado apretó sus puños en la mesa, dándole la pista a todos ahí.

— ¿Se vieron? — preguntó asombrado Kid.

Este sabía la historia y estaba al día, sin embargo, no estaba enterado que hoy ellos se habían visto, o eso pensaba.

— No.