DEVIL'S ADVOCATE / SUNGHOON

19. High School Sweethearts

Creo que jamás había hecho el ridículo hasta este punto.

— ¿Segura que no tienes apetito hoy? —Jisoo se sentó a mi lado con su bandeja, mientras mi mirada se paseaba por la cafetería buscando a Sunghoon.

— No, puede que hoy me devore un plato grande. Y no el buen sentido —comenté, por lo que la pelinegra me miro extrañada.

Observé como Sunghoon ya se hallaba comiendo en una de las mesas de la cafetería. Una chica de cabellos claros comenzó a acercársele y esté notándolo, se giro a verme, dándome una mirada que me decía que ya era hora de hacer el ridículo frente a la cafetería.

— Después me pegas una cachetada por esto ¿Sí? —Le pedí a Jisoo, levantadome de la mesa para ir en dirección a Sunghoon.

Está bien. ¿Sabes qué, Willow?
Tu puedes con esto. Lo tienes, eres la mejor actriz que existe. No hiciste por nada el papel protagónico de Shrek en quinto año y haber recibido una ovalada de aplausos. Y como olvidar cuando tú y Sunoo eran la sensación en cada cena de año nuevo al interpretar canciones pop con coreografía y vestuario, a pesar que la mayor partes de las letras eran inventadas y nos quedábamos sin aire. Tenía dotes artísticos por naturaleza, esto era pan comido.

Saqué una goma de mascar y me la eche rápidamente a la boca para entrar en papel protagónico. Me acerqué a la mesa, observando como la chica parecía estar rogándole sobre algo a Sunghoon, cuando llegué abruptamente, dandole un caderazo en su trasero para moverla en segundos del camino. Me dejé caer en el asiento al lado de Sunghoon, despositando un beso corto en su mejilla para luego apoyar mi cabeza en su hombro con mucho cariño.

Lo sé, merecía un oscar.

El pelinegro abrió sus ojos en una leve sorpresa y miro a otro lado, como si quisiera ocultar una sonrisa.

Comencé a jugar con la goma de mascar con mis dedos asquerosamente y recibí una mirada láser por parte de la chica que internamente me hizo doler el estómago. Solo esperaba no terminar con mechones de cabello suelto hoy.

— ¿Qué haces? —soltó incrédula ante la escena que habían presenciado sus ojos y rodeé mi mirada a un lado, simulando irritarme.

— ¿Pues que más crees que hago? Solo estoy sentada aquí... No es tanta lógica... —hablé, siendo interrumpida por el manotazo en el rostro de su parte que me hizo salir por unos segundos del papel.

— ¿Pero qué..? ¡¿Qué mal está contigo! —jadeé, llevando una de mis manos a mi mejilla con pasmo.

La chica ignoró mi reacción y miro a Sunghoon quién tenía sus labios levemente abiertos ante la escena.

— ¡Dijiste que no tenias novia! —exclamó, llamando la atención de gran parte de la cafetería.

Sunghoon intercambio miradas conmigo y al verme aun sobandome la mejilla como la exagerada que era, volvió a mirar a la chica con un semblante que paso de ser uno inexpresivo a uno severo.

— No mentía. Solo que ahora sí tengo, agradecería que dejaras de acosarme como lo has estado haciendo... Y no la vuelvas a tocar sí no me quieres ver enfurecer —le advirtió con una voz hosca, acercándome a él, abrazándome.

Está bien, lo tengo que tenía que admitir, Sunghoon también podría ser un buen actor.

Rápidamente la cafetería se llenó de murmullos y la chica parecía sorprenderse para mal.

— ¿Es broma? ¡Es la primera vez que te veo interactuar con ella! ¡Ni siquiera se ven bien juntos! ¡Es horrible! —reclamó y abri la boca ofendida.

— Bueno ¿Qué esperabas? No conseguirás a un chico hostigándolo todos los días como una loca... —solté harta y la chica suspiro con fuerzas.

— Diablos... —comenzó a llorar falsamente y se llevó las manos al rostro—. ¡Eres un Imbécil, Sunghoon!