El traje que me había prestado Sunoo me quedaba algo grande, además, el maletín negro me hacía parecer más una especie de abogada o empresaria.
Claramente este no era lo más similar a un espía.Me hice un maquillaje suave y le dí mis últimos retoques al disfraz, cuando oí el timbre de la casa sonar.
— ¡Yo voy! —grité y baje casi volando las escaleras.
Abrí la puerta y sonreí al ver a Jungwon del otro lado. Vestía un traje negro y una corbata del mismo color ajustada de una manera elegante a su largo cuello.
— ¿Lista? Te vez realmente bonita en traje... —Sonrió y asentí, cohibiéndome ligeramente ante su cumplido.
— Gracias... tú también te vez bonito hoy, Jungwon —contesté y esté hizo aparecer sus margaritas.
— ¿Vamos? —Me ofreció su brazo y lo tomé sin dudar.
Nos fuimos juntos hacía la escuela hablando de un poco de todo. Como siempre, me comentó sobre fútbol americano y como su grupo favorito había perdido un campeonato muy importante por lo que estaba realmente furioso. Hablaba tanto que simplemente me permití escucharlo entretenida.
Ya cuando comenzábamos a adentrarnos a la escuela, empezamos a encontrarnos con estudiantes disfrazados. Sentí un leve nerviosismo aparecer, como también esa extraña sensación que te da en la panza cada vez que te sientes ligeramente pequeña en algún lugar.
— ¡Hey! ¡Chicos! —Jungwon alzo su voz al ver en la entrada a sus amigos. Estos nos vieron y murmuraron un oar de cosas entre ellos, sonriéndonos.
El pelinegro se acerco a saludarlos como si estuvieran a punto de empezar un partido y estos lo saludaron de vuelta de la misma manera. Algunos de ellos me miraron y no tuve de otra que saludarlos a la distancia mientras esperaba al mariscal de campo terminar su acto fraternal.
— ¡Willow!
Me giré y sonreí al instante al ver a Sunoo venir corriendo hacía mí vestido de conejo junto a Jisoo, quién parecía una verdadera chica gótica con los cinturones, cadenas y maquillaje oscuro que llevaba.
— Vaya... no me lo creo... —solté una risita de sorpresa y abracé a Sunoo, viendo como Jisoo me lanzaba un beso mientras masticaba un chicle notoriamente.
— ¿Qué te parece? ¿Combinamos? —Sonrió mi amigo haciendo una tierna pose junto a Jisoo, por lo que asentí entretenida.
— Como el yin y el yang.
— ¿Me llamaste? —Se acercó Jungwon sonriendo hasta que se percató del disfraz de Jisoo y comenzó a reírse.
— ¿De que te ríes, tonto? —Jisoo hizo un ademán de que lo iba golpear y esté nego, juguetón.
— No te queda nada mal ese estilo, al igual que él... ¿Sunoo, verdad? —Jungwon lo miró y esté último asintió con orgullo.
— ¿Ustedes de que diablos se disfrazaron? ¿Son empresarios o algo? —Se rió Jisoo, ahora burlándose de nosotros.
— Espías —la corrigió Jungwon dándole un empujón de hombro y asentí, mostrando mi maletín con ternura.
— Los espías no usan maleta, solo los abogados Willow... —Me miró Sunoo y rodeé los ojos a un lado.
— Pues este espía sí.
— Como sea... ¡Entremos! ¡Quiero bailar ya! —Nos ánimo Jisoo y le hicimos caso.
El gimnasio ahora tenía sus luces principales apagadas y solo habían un par de luces frías y azules que apuntaban hacía un escenario y algunas partes del público. Había una música realmente movida y una larga mesa llena de snacks y diferente tipos de bebidas y comida. El lugar estaba repleto de estudiantes disfrazados los cuales parecían ya estar pasándola bien.
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DEVIL'S ADVOCATE / SUNGHOON
FanfictionWillow y Sunoo son vecinos. Han vivido toda su juventud en un barrio en donde la existencia de chicos de su edad es completamente nula. Eso, hasta que llega una familia nueva al lugar con tres adorables hijos. 𝑁𝑜 𝑠𝑒 𝑝𝑒𝑟𝑚𝑖𝑡𝑒 𝑙𝑎 𝑐𝑜𝑝𝑖�...