DEVIL'S ADVOCATE / SUNGHOON

20. Zero moment

El viernes llegó con rápidez.
Después de la discusión con Sunghoon y su hermano de por medio, no volví a intercambiar palabras con él, como tampoco fui a su casa después de clases para repasar matemáticas.

Lo único que agradecía era que efectivamente, me había ido realmente bien en el proyecto de matemáticas junto a él, siendo la nota más alta del salón. Pero no mezclaba mis asignaturas con los sentimientos. Mi enojo y resentimiento aún seguía intacto.

Para ir al museo los alumnos se dirigieron a la entrada de la escuela para empezar a subirse a los buses. Observé de reojo como Sunghoon hablaba con un par de chicos, en dónde cercanos a ellos estaba el equipo de fútbol americano. Divisé a Jungwon por su mullet y la alegría que lo acompañaba, suspiré levemente nerviosa y me acerqué a él, captando la atención de todos sus amigos cuando toqué su hombro para hablar.

— Hola Jungwon... —Sonreí a medias—. Lamentó lo de antes ¿Todavía estas en busca de una compoñante de asiento? —inquirí y esté me observo, sonriendo con algo de vergüenza al escuchar como sus amigos comenzaban a molestarlo rápidamente.

Esté hizo un gesto como si les fuese a pegar para que se callaran y sonriéndome de vuelta nuevamente, asintió.

— ¿Tu novio celoso no se enojara? —preguntó y negué rodeando los ojos a un lado.

— No, ni siquiera somos novios... —Le deje en claro, haciendo que sus hoyuelos en su rostro aparecieran notablemente.

— Genial.

¿Así de fácil er socializar? Vaya, debería de hacerlo más seguido.

Esperando a entrar al bus charle durante un rato con Jungwon. Era sin duda un chico agradable y atento, totalmente opuesto a la personalidad de Sunghoon, no habían razones como para odiarlo. Fue agradable irme a su lado en el bus, a pesar de que a veces empezaba a hablarme de cosas un poco extrañas, como por ejemplo de como tomar correctamente el balón de fútbol americano, gracias a eso pude distraer mi mente por un buen rato.

— ¡Bajen ordenados, idiotas! —grito el moreno al ver como sus amigos corrían directo a la salida del bus a penas este se estacionó fuera del museo.

Solté una risita entretenida y esté se volteó a verme sonriendo, para después tomar de mi mano y ayudarme a salir del bus.

El museo era realmente grande y bonito. No había tenido tiempo antes de visitarlo antes, pero ya estaba lista para tomar muchas fotos.

Jungwon se fue a hablar con sus amigos, dejándome por unos cuantos segundos a solas, en los cuales Sunoo apareció a mi lado casi al instante, sonriendo emocionado.

— ¿Ya viste? ¡Necesitamos una foto en este lugar! —Me abrazo hacía él, empezando a tomar selfies graciosa de nosotros con muchas muecas y posiciones tontas—. Iré dónde Jisoo y por cierto, ese angelito no a parado de mirarte desde que llegamos... —Apuntó con la mirada a Sunghoon, quién se hallaba en la entrada del museo observando una estatua con su semblante inexpresivo, pero mirada aniquiladora.

Se veía molesto, ¿Acaso eso no era normal en él?

Los estudiantes comenzaron a dividirse en grupos por el museo, observando y apreciando el arte bello del lugar, como también aprovechando para sacarse fotos como si estuviéramos en un estudio fotográfico.

Me quedé a solas por un momento, observando como Jungwon veía las obras, molestándose y jugueteando con los chicos que lo rodeaban de vez en cuando. Tal vez estaba acostumbrada al comportamiento aburrido y hosco de Sunghoon, pero el mariscal de campo comenzaba a parecerme algo infantil. No me molestaba. Como había dicho antes, se me hacía agradable y divertido.