12. Bad Boy Down

2.9K 363 85
                                    

El lunes en el último periodo nos toco matemáticas.
El profesora antes de terminar la clase e irse, mencionó algo que me había dejado bastante preocupada.

Para la siguiente clase, teníamos que llegar con una pareja ya lista, debidos a que haríamos la primera pureba en dúos, y la nota contaría como doble.

Todos sabían que el chico con el mejor promedio de la clase en esa asignatura hasta ahora, se trataba del engreído de Sunghoon. Por ende, apenas terminó la clase comenzaron a acercársele estudiantes con la intención de conseguir ser su pareja para el proyecto. El pelinegro sonriéndoles amablemente les respondía a todos con un "lo pensaré" que comenzaba a provocar un pequeño tic en mi ojo izquierdo.

Jamás me considere como una persona posesiva, pero la asignatura de matemáticas tenía contra mi pecho una larga cuchilla que en cualquier momento me atravesaría si no mejaraba mis calificaciones, y estaba demás decir que no pensaba arriesgarme, menos en un trabajo con nota doble.

— ¡No! ¡Olvidenlo! —Me levanté de mi asiento de golpe, dirigiendo mi mirada a todo el grupo de alumnos que rodeaba a Sunghoon, quiénes me voltearon a ver repentinamente.

Sunghoon se giró a verme con desagrado en su mirada y yo aclaré mi gargante, sintiéndo que había exagerado algo ante mi impulsiva acción.

— Él ya es conmigo, consíganse otra pareja —declaré apuntando con la mirada al pelinegro al mismo tiempo en que me cruzaba de brazos con la intención de verme seria al respecto.

— Eso no es ciert... —Alcanzo a decir el pálido antes de que le cerrara la boca con mi mano.

— ¿Qué esperan? Vayan a otro lado a buscar pareja para el proyecto —solté altaneramente, por lo qué nuestros compañeros de clase comenzaron a quejarse, esparciéndose nuevamente por el salón sin insistir más.

Me gire a ver a Sunghoon y saque mi mano de su boca con suavidad, sonriéndole nerviosamente.

— ¿Quieres ser mi pareja para el trabajo? —inquirí con una dulce voz, recibiendo una mirada mortal del contrario.

— No.

— Por favor... —Dí unos pequeños saltitos a su lado, comenzando a desesperame.

— Hacerte clases privadas ya es suficiente tortura para mí.

— Ahg, vamos, por favor, realmente quiero una buena nota... —Dejé mi orgulllo de lado y traté de que el contrario sintiera pena por mí, arrugando mi mentón y pestañeando un par de veces, abriendo más de lo normal mis ojos.

— Para ya... No seré contigo. Además, ¿Qué gano yo? —Se cruzó de brazos, desviando su mirada a otro lado con desinterés.

— Bueno... Sí aceptas, te daré lo que desees —mentí atrevidamente y esté soltó una risita forzada.

— Pero no deseo nada de tí.

— ¿Cuando dije que sería algo relacionado conmigo? —Sonreí extrañada y esté volteó a verme, mordiendo su labio con fastidio.

— Solo olvidalo ¿Quieres? Consigue a otra pareja. —Se levanto de su asiento decidido al respecto y se fue del salón, dejándome con las palabras de persuasión en la boca.

Suspiré irritada ante su arrogante actitud y tuve la intención de ir tras él, pero para cuando salí del salón esté ya se había perdido entre los estudiantes.

— Me gustaría hablar contigo.

Me dí vuelta aún molesta al escuchar una voz rasposa que se me hizo conocida, encontrándome con uno de los chicos con los que Sunghoon había peleado anteriormente.

DEVIL'S ADVOCATE / SUNGHOONDonde viven las historias. Descúbrelo ahora