CAPÍTULO VEINTIOCHO

4K 280 5
                                    

NICOLAS

Nuestros tenedores resonaban sobre la vajilla, teníamos unos treinta minutos sentados alrededor del comedor, una brisa calidad recorría todo el lugar y eso dejó espacio para tomar el desayuno en el patio, Noah a mi lado izquierdo remolía con ansia los panqueques de nuez que Luisa le hizo especial y solamente para él, lo que nos faltaba a la castaña y a mí, más personas que solapen y malcríen al niño.

Mi madre leía con calma el periódico y Astrid al frente mío tenía la vista puesta en algún sitio del lugar, jalaron la silla a mi costado derecho y apareció mi abuelo, aún tenía puesta la bata de dormir, Luisa le acercó un plato y los cubiertos para que se sirviera lo que deseara, todo siguió su rumbo habitual hasta que mi madre dejó el periódico de lado y giró la cara en dirección de Astrid.

—¿Cómo están tus padres querida?—la castaña se acomodó sobre su lugar y le sonrió de lado

—Bastante bien, están en Texas con mis hermanos....

—¿Tienes hermanos?—preguntó mi abuelo pasando el bocado de su boca

—Si, Darek y Derik, gemelos y son más grandes que yo...

—No lo sabía...—mi madre la miró—¿Tú sigues jugando tenis?—esa pregunta me hizo alzar la cara y de reojo detallar a la castaña, un sonrojo le cubrió las mejillas

—No. Hace años que lo deje...—la observe enarcando las cejas porque yo no lo sabía, ella agacho la cabeza cuando sintió la mirada—Solo lo practique de niña durante un tiempo después me di cuenta que no era la mío y pasó a segundo plano, el que sigue jugando es mi hermano Darek, irá a Australia el próximo mes...—mi madre asintió

—¿Me dijeron que eres Arquitecta?—volvió a preguntar mi abuelo

—Si—contesto en concreto

—Estaría encantado de ver alguno de tus diseños...—la señaló por un momento con el tenedor—Espero que mi nieto te dijera a lo que me dedico...—ella asintió—Algún día él deberá hacerse cargo de la empresa, confió en que podrán ser un buen equipo...

Con esa frase la sangre me bajo de la cabeza a los pies, vaya forma de soltar las verdades que tiene mi abuelo, los movimientos de todos los presentes por microsegundos se pasmaron a excepción del pequeño que estaba ajeno a todo, la castaña agacho la cabeza confundida y por inercia yo hice lo mismo.

Decir que el desayuno término de una forma muy incómodo está de más, Astrid salió huyendo y se ha quedado toda la mañana en la habitación, mi madre logró convencer a Noah para jugar un rato en el viejo columpio hecho de una llanta que cuelga de un árbol en el jardín trasero, pude sentir los pasos de mi abuelo por detrás.

—No era la forma de solar las cosas...—recalque en tono mordaz

—Lo sé...—se quedó parado justo a mi costado derecho

—Entiendo que nadie es eterno, pero que te quede claro, no tienes ningún derecho a presionarme de esa forma para tomar decisiones que aún no son necesarias....

—Sabes que algún día se enteraría y que tarde o temprano tendrás que hacerte cargo...—eso me hizo hervir la sangre y por inercia apreté los puños sobre mis palmas

—Aún no es el momento...—recalque y di media vuelta dejándolo ahí parado.

Quería tocar la puerta de la habitación pero estaba entreabierta así que con suma facilidad podía escuchar las voces dentro, no era mi intención husmear en algo que no es de mi incumbencia pero por reflejo me detuve justo en la hendidura.

—No era la forma de soltar las cosas...—esa era la voz de Astrid pero estaba de espaldas al tocador y mirando su celular, una videollamada supongo—Me estaba resultando imposible callarme y no decir una tontería....

ÉXITO Y GLORIA (COMPLETA)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora