❄️ ❄️ ❄️
Hielo, patines y pasión.
Eso era lo que más amaba en la vida dos chicos muy diferentes, dos personas que aman patinar sobre hielo, tienen real pasión por lo que hacen.
Uno ama el patinaje artístico.
Otro ama el hockey.
Sin embargo, un accid...
¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.
~ Especial Namjin ~
(Narrador Omnisciente)
Seokjin se encontraba en la cocina preparando leche de fresa acompañado de unas galletitas con chispas de chocolate que Tae le regaló el día anterior.
El Omega pelimorado había estado sintiendo unos cuantos antojos que creyó habían desapareció hace unos días. Aunque no era nada extraño para comer, estaba muy entusiasmado preparando sus aperitivos para poder disfrutar mientras veía una película.
Aquella tarde su amado Alfa había ido a la tienda para verificar que todo marchara bien. Le aseguro que regresaría pronto, ya que no estaba en sus planes dejarlo solo por tanto tiempo. El Omega siempre confiaba en las palabras de su amado.
Jin se había estado sintiendo muy solo los últimos días. Sus pequeños amigos habían estado muy ocupados viajando por competencias en otros países. Él no podía viajar como su entrenador personal por obvias razones, así que el padre de Tae se había ofrecido acompañarlos en cada uno de sus viajes.
En algunos viajes, Yoongi y Jungkook lograban acompañar a sus parejas, pero en algunos otros era imposible, ya que ambos Alfas también debían entrenar y prepararse para competencias. Sobre todo porque dentro de un par de meses tendrían una competencia muy esperada por Yoongi.
El Alfa azabache se enfrentaría contra su equipo anterior. Del que fue capitán en Canadá y del cual fue expulsado. Ansiaba poder mostrar lo que había avanzado y que a pesar de no ser capitán como lo fue antes, era uno de los mejores jugadores de Hockey en su equipo actual.
Por esa razón, los Alfas no siempre podían acompañar a sus parejas cuando éstos eran invitados a competir en diferentes países contra otros patinadores. Aquello podía ser un bache muy grande para la relación de ambas parejas, pero tal parecía que la confianza y el amor de estos era mucho más grande que cualquier inseguridad.
Jin se sentía orgulloso de saber que aquellos chicos a pesar de ser muy jóvenes y aparentar inmadurez, no lo eran. Son muy seguros de si mismos y del eterno amor que se tienen. Para el Omega pelimorado aquellos cuatro chicos eran como sus hermanitos menores, los que nunca tuvo y los aprecia como tal.
El Omega de cabellera lila sonrió al pensar en sus pequeños, como él los había estado llamando últimamente. Tomo asiento en el sofá de su casa y puso una película animada para distraerse lo suficiente. Mientras veía televisión su teléfono comenzó a sonar y atendió la llamada sin ver el remitente ya que la película lo tenía muy atrapado.
- Diga.
- Hola Jin Hyung - La suave voz de Jimin se dejó escuchar.
- ¡Oh! - El Omega presto toda su atención a la llamada - ¡Minnie!, ¿Cómo estás pequeño?, No sabes cuánta falta me hacen - Fingió sollozar - ¿Cuándo regresan?
