Capítulo 10 - La peor película del mundo

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Creía conocer el significado de la palabra "ansiedad" de sobra, pero no, resultaba que podía subir todavía más de nivel.

Desde aquella propuesta que le hizo a Zoro en el acantilado, las cosas parecían no haber cambiado en absoluto visto desde fuera, seguían yendo a clase con normalidad, a veces se veían con Luffy fuera de clase... pero ahora se había añadido que este le acompañaba hasta el Baratie, o le decía que fuese a su casa a estar con él, cosa que se negaba a hacer en rotundo.

El otoño había llegado con fuerza a la isla Dawn, las hojas ya decoraban las calles por haberse desprendido de los árboles, el viento era más frio y fuerte, la temporada de lluvia no tardó en caer, por lo que prácticamente todos los días debian de llevar el paraguas para los repentinos chaparrones que solían caer.

Habían quedado los tres en ir a ver una película en casa del kendoka en su día libre, la lluvia mojaba el asfalto suavemente todavía, pero conforme se acercaba al apartamento iba apretando cada vez más fuerte, por suerte, no se mojó cuando llegó al bloque de apartamentos, dejó el paraguas en la entrada y aunque conocía el código de apertura de la vivienda tocó al timbre para que este le abriese.

- Hola, marimo. – Saludó nada mas entrar, todo estaba demasiado silencioso, eso solo podía significar una cosa- ¿Todavía no ha llegado Luffy?

- No. – Dijo tras desperezarse, olía a jabón, seguramente acababa de salir de la ducha por haber estado entrenando todo el día como solía hacer en los días que no había clases – Va a llegar calado hasta los huesos.

- Ese idiota no usa un paraguas ni aunque lo maten... - Fue hasta la cristalera del balcón, vio que apretaba más la lluvia e incluso cayó un rayo, el cielo estaba totalmente negro. Zoro fue hacia la cocina y eso le llamó la atención - ¿Qué vas a hacer?

- Palomitas. – Sacó del armario unas bolsas preparadas para meter en el microondas – Así cuando llegue ya estarán hechas.

- De acuerdo.

Por raro que pudiese parecer, decidió dejar la cocina en manos de Zoro, con sigilo, se metió en la habitación de este, era su turno.

Desde que se regalaron aquellos horribles muñecos en la despedida de Vivi, habían cogido la costumbre de intentar endosárselo al otro a la mínima oportunidad, se lo escondían en la cartera, la ropa o en sus habitaciones. Todo aquel juego empezó con que Zoro no quiso ponerse el llavero-marimo en la cartera, así que, Sanji se lo colocaba en lugares donde pudiese encontrarlo fácilmente por toda su casa con frases tipo "Papi, quiéreme.", "Dame de comer algas de tu cabeza." y multitud de frases que Zoro acabó por meter el llavero en la cartera de Sanji con un cartel de "Mi papá me ha abandonado, adóptame.".

Desde entonces, el peluche iba y venía de una casa a otra, hasta que el rubio, en uno de sus turnos, llevó también el pato al aseo del peliverde con un "Ahora vivo aquí, bastardo.". Era el peculiar juego que se habían buscado y que, aunque parecían molestos cada vez que lo encontraban en algún extraño lugar, les gustaba y decidían continuarlo.

- Aquí no te encontrará nunca. – Le susurró al llavero antes de dar un buen salto y colocarlo en una de las aspas del ventilador de techo que había en el dormitorio, al hacer frío, no lo enchufaría en una buena temporada – Buena suerte, bebé marimo.

El muñecajo quedó justo que solo se le veían los ojos malhumorados desde donde estaba, quizás lo viese una vez que Zoro se tumbase en el futón y se sintiese observado, la idea le hizo bastante gracia. Él todavía no había encontrado a su pato, ya le buscaría un sitio llegado el momento.

Volvió a la cocina a tiempo de escuchar el microondas dar la señal de que había terminado de preparar el aperitivo, sacó un par de cervezas para ellos y un refresco para Luffy para llevarlos a la mesa bajita del comedor, sacó de su chaqueta el DVD de la película que iban a ver, no tenía ni idea de que iba, solo que Usopp se la había recomendado al moreno y decía que era genial... Conociendo los gustos de ambos no apostaba por ello.

Quiero que seas egoísta - Instituto One PieceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora