Capítulo 29 - La reunión

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Hacía un par de meses su móvil vibró cuando recibió un correo electrónico inesperado, lo leyó una vez y no se lo creyó, lo releyó cinco veces más hasta que sus ojos brillaron emocionados ante la invitación que había delante de él. No tardó ni dos segundos en conformar su asistencia.

Salió del coche a toda velocidad el día acordado en dirección al edificio donde le habían citado, había estado en él decenas de veces, pero esta era la primera vez que entraba siendo de noche. Abrió las puertas de par en par ignorando la recepción y fue directo hacia las otras puertas donde estaba lo que realmente le importaba.

El gimnasio del instituto One Piece estaba decorado y lleno de mesas donde muchos ya habían llegado y estaba con sus viejos amigos, había pasado diez años desde la ceremonia de graduación y el que fue por entonces el delegado estudiantil fue quien mandó el mail anunciando que habría una reunión de antiguos alumnos para recordar viejos tiempos y ponerse al día, por supuesto le encantó la idea.

- ¿Es Sanji? – Preguntó una mujer a otra al verle allí plantado.

- Si, es él. – Se alegró de reconocerla otra y alzó la mano para saludarle - ¡Hola, Sanji!

- ¡Ah, mis hermosas compañeras de clase! - Se acercó a ellas para tomar sus manos y darles un beso en el dorso a cada una como todo un galán – Los años han pasado bien para vosotras.

Estas comenzaron a reir tontamente mientras observaban al rubio, ahora llevaba su ojo izquierdo visible y ocultaba el derecho con su flequillo, tenía una pequeñísima cicatriz cerca del rabillo del ojo, les llamó mucho la atención que ahora fuese ese ojo el que estuviese al descubierto. Claro que ellas no sabían de toda la historia que había tras aquello, ni tampoco sabían que había pasado por una operación para sanarlo y que su pupila recuperase su forma redondeada. También había dejado crecer su cabello que recogía en una pequeña coleta y una perilla rubia oscura en su barbilla que le sentaba muy bien, le hacía parecer más adulto.

Vestía un traje chaqueta color granate oscuro, camisa negra y una corbata blanca que parecía hecho a medida, eso o su cuerpo estaba más fuerte por lo ancha que tenía ahora la espalda.

- Me alegro de verte, Sanji. – Miró a sus lados y se extrañó- Pensaba que vendrías con Zoro.

- Eso, eso ¿Dónde está tu novio?

- Ah... él ya no es mi novio. – Se sacó su caja de cigarros para sacarse uno – Ahora es mi exnovio.

Se quedaron con la boca abierta, con lo enamorados que parecían en el instituto daban por hecho que seguían juntos, aun con los rumores y las habladurías sobre los dos mujeriegos del instituto se hiciesen pareja les hacía pensar que podrían superarlo todo.

- ¿Quieres dejar de decirlo así? – Gruñó el aludido que había llegado justo a tiempo de escuchar la respuesta del rubio y ponerse a su lado con un chasquido de lengua. – Ahora soy Kuroashi Zoro, su marido.

Sanji comenzó a reírse de buena gana al ver como estas se quedaban de piedra por la broma y la respuesta del peliverde, ambos mostraron los anillos a juego que llevaban en sus respectivas manos y se disculpó el cocinero por la broma que les había hecho.

Fue entonces cuando repararon también en Zoro, estaba mucho más corpulento, iba también vestido con traje de chaqueta negro, al igual que su camisa y su corbata verde oscura, ya no llevaba sus peculiares pendientes en su oreja izquierda, lo que si se notaba a simple vista es la enorme cicatriz que cubría desde la frente a la mitad de la mejilla traspasando su ojo izquierdo, parecía un auténtico mafioso, uno muy sexy.

- ¡Zoro, Sanji, aquí! – Exclamó una voz familiar femenina.

- ¡Nami-swaaaaaaan! – Gritó feliz el rubio de ver a su amiga a varios metros de distancia que recorrió en un segundo para abrazarla - ¡Pareces una diosa!

Quiero que seas egoísta - Instituto One PieceDonde viven las historias. Descúbrelo ahora