Ok así lo haremos – ambos se sonrieron, haciendo que el corazón del pequeño A-Yuan latiera rápidamente.
Su gege bonito había dicho que diría era su hijo, no sabía realmente que estaba sucediendo pero eso lleno su corazón de felicidad y calidez que lo arrullaba.
Así lo hicieron esa tarde el conejito A-Yuan estaba viviendo uno de sus más grandes sueños.
Había estado a la par de su gege bonito y aún más lo había llamado mami delante de su jefe, para que pudiera quedarse con el.
Observo cómo su papi no paraba de ver a su gege bonito, tenía mucho que contarle a la abuelita Teng.
Deseaba con todas sus fuerzas correr a sus brazos y contarle todo lo había logrado sacarle a su papi conejo.
La hora de salida llegó y con ella la despedida de madre e hijo, se estaban acostumbrando a su compañía que se les estaba haciendo difícil cada tarde despedirse.
Cada uno iba por su lado, pero el azabache volvió a ver aquel hombre que veía a su Bodi y conejito en el parque, que iba siguiendo al castaño.
Tomo en brazos a su bebé y camino detrás también, no quería que nada malo le pasará al castaño.
Dio gracias al cielo al ver cómo su Bodi subía al bus y aquel hombre se iba hacia un carro negro que lo esperaba.
Le envío un mensaje al castaño diciéndole que se cuidara mucho y le avisará cuando llegara a casa, sentía algo raro en su pecho.
Volvió al hotel con su conejito ya durmiendo en brazos, hizo la misma rutina de siempre, trabajar por las noches, el cansancio empezaba a notarse.
Sus ojos estaban transformándose en ojos de mapache, por las grandes ojeras que tenía bajo estos debido al desvelo.
Pero quería salir lo más pronto posible de esa deuda que tenía y así poder darle todo lo mejor a su conejito.
En la mañana siguiente volvieron hacer lo mismo, al llegar la hora de medio día ambos jóvenes salían corriendo en busca de su conejito.
Pero los coqueteos sutiles del azabache no se hicieron esperar más.
En algunas ocasiones pequeños roces de mano y una que otra peonia y rosa le eran entregadas al castaño por las mañanas.
Siguieron comiendo los tres juntos, en su lugar favorito en aquel parque que era testigo de muchas sonrisas y bonitos momentos.
Liu Hai Kuan, permitió que el castaño llevará al conejito, por más que quizo el castaño hacerle creer que era su hijo, el otro lo descubrió el niño era la viva imagen de Xiao Zhan.
Pero no le dijo nada al castaño frente al niño, al siguiente día lo llamo y este le contó la verdad.
Liu Hai Kuan tenía un gran corazón y noble, le permitió llevar al niño por las tardes al trabajo, había notado que el niño era muy obediente e inteligente.
Xiao Zhan se las ingenio para ser él, quien traía en ocasiones el almuerzo para los tres.
No quería que toda esa sobrecarga le tocará solo al castaño, empezó a trabajar más por las noches, estaba durmiendo solo tres oh cuatro horas cuando bien le iba.
El azabache siguió cuidando al castaño, había ocasiones que lo iba a dejar hasta la parada del bus, lo abrazaba para que el otro notara que el castaño tenía quien lo cuidara.
No le había comentado nada al castaño aún, tenía miedo que el otro pensará el estaba loco, siempre se las ingeniaba para que el otro pensará que solo lo acompañaba por su compañía.
ESTÁS LEYENDO
Una Mamá Para A-Yuan
Short StoryPodrá el pequeño A-Yuan de cinco años de edad, encontrar una mami que llene su corazoncito de amor y de felicidad. Podra su papi hacer realidad su sueño de tener una mamá. Sera capaz su papá Xiao Conejo Zhan, poder conquistar a la persona que el peq...