De plumas doradas | Hunter x Male!OC

Capítulo 12.2

"¿Se pone mejor?"

Las cosas no iban avanzando a la velocidad que le gustaría, así que Luz decidió juntarlos a todos para ver las opciones y conclusiones a las que habían llegado en las últimas semanas. Después de todo, tenían que comenzar con sus intentos, se habían quedado atascados en lo teórico. Por eso, el desayuno era la mejor hora para hacerlo, la comida a la que siempre todos asistían.

Las comidas habían sido más fáciles de lo que esperaban, pues descubrieron que las brujas y demonios son capaces de digerir con facilidad la comida humana, cosa que hacía sentido, pues las Islas era un mundo con animales extraños en cada aspecto investigable.

Con todos sentados en la mesa, incluso Alistair, era momento de planear.

Luz coloca distintos papeles y hojas de anotaciones en frente de todos, incluyendo un diagrama del circuito que tenía pensado para alimentar una puerta y utilizarla para contener el portal. Habían distintas opciones tachadas para alimentar el sistema, incluyendo un par de posibilidades mezcladas.

Ella apunta a un boceto de la casa abandonada, con un generador conectado a ruedas para que los taliamigos corran y alimenten el circuito. Usarían tres fuentes; el propio generador, la energía cinética y la magia de los animales de madera.

—Un generador es lo más accesible en nuestras condiciones.

—¿Será suficiente? —pregunta Hunter.

—Es nuestra mejor opción. No sé si hay fuentes de energía más potentes a nuestro alcance.

Los dos no tocan sus platos, mientras el resto come con la atención puesta en ellos. Alistair intenta concentrarse a pesar de todo, viendo formas de hacer funcionar ese sistema; la tecnología humana es extraña, por lo que necesitaría un poco más de tiempo para estudiarla y conseguir que la magia no explote el generador, o algo similar. Sería más fácil si estuviese en mejor estado.

Apenas terminan de planear, y finalmente Hunter y Luz tocan sus comidas, Alistair se levanta de la mesa. Deja que Ericko le dirija al avanzar con los ojos cerrados, hasta alcanzar el sillón y poder recostarse, usando a su taliamigo para cerrar las cortinas con un simple hechizo que no requiere de su magia. Incluso en las mañanas puede sentir esas náuseas, desearía que no fuese así, porque la comida de la casa Noceda es deliciosa, y se siente como un maleducado por estar vomitándola con una esporádica costumbre. No quiere, prefiere evitarlo por completo.

Deseando que el demonio estuviese ahí, también planean cómo conseguir las cosas que necesitarían para intentar replicar la pócima que tomaba en las Islas. Tenían la mandrágora y reptadora, quedaba intentar con miel del mundo humano, conseguir el acónito y descubrir si había de esa clase de gusano al alcance. Quién sabe, quizás alguno cayó en una poza de sangre de Titán, incluso Eda pudo haberse traído algunos en una de sus aventuras.

Quedaba ver los grupos, sería bueno separarse.

—Creo que Vee y yo deberíamos liderar los grupos —propone Luz, anotando las cosas y viendo dónde podrían conseguirlas—, más fáciles guiarnos así.

—Entonces yo me encargo de la hierba lobuna. —responde Willow, intentando imaginarse las temibles plantas de las Islas, ahora reducidas en el mundo humano.