Capítulo 3.3

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"Lazos unidos por sangre"


—¡Porque ustedes son unos perdedores! —exclama una joven voz conocida para el grupo.

Todos giran para encontrarse con viejos compañeros esperando en el techo de uno de los edificios cercanos, uniformes de Hexside modificados y una bandera alzada mientras tenían el sol a las espaldas.

Las orejas de Alistair se levantan un poco con interés al reconocer a Skara, la bruja sonriendo con amplitud al encontrar al resto de su equipo de Derby Aéreo. Entre ellos también reconoce a Matt, lo recuerda por verlo con el uniforme de la clase de Construcción y por todas las veces que Gus lo ha mencionado. Pero no está seguro del nombre de aquel demonio canino que les acompaña.

El trío de estudiantes bajan en sus bastones para encontrarse con los demás. Gus es rápido en acometer contra Matt para abrazarlo, aunque pronto los dos chicos están intercambiando empujones y coscorrones. Por su parte, Skara chilla al correr hasta Willow y Hunter, atrapando a los dos entre sus brazos mientras da pequeños saltos en su lugar.

Camila se relaja y aleja la mano del bate. Amity se queda junto a la mujer humana, mientras Luz se acerca para saludar a Barcus, aquel demonio canino, y conversar un poco con él.

Alistair espera hasta que Skara se separa de los brujos, ella misma camina hasta él y Amity, repitiendo el mismo gesto. El demonio se sorprende del agarre de la bruja, mientras ella se ríe y balbucea de la emoción al encontrarse con caras conocidas que creían perdidas.

—Por fin están de vuelta. —dice Skara en un suspiro.

No se dicen mucho antes de que tomen rumbo hacia la escuela.

Skara y Matt toman la delantera, cruzando callejones hasta poder escabullirse entre los caminos boscosos de Huesosburgo. Barcus se mantiene cerca del grupo, bastante relajado entre la cubierta que los árboles les dan.

Ya entre las sombras es que Skara y Matt explican la decisión de moverse con tanta precaución, describen cómo fue el Día de la Unidad en las Islas, el caos de estar refugiados en la escuela mientras cada adulto agonizaba por aquel hechizo de drenado. Nadie sabía qué hacer hasta que por arte de magia aquello se detuvo. No pudieron descansar mucho, pues los espías de El Coleccionista alcanzaron el edificio, evento en el que perdieron algunos compañeros y a todos los profesores. Esa fue distracción suficiente para ocultarse dentro de Hexside.

La idea consume la mente de Alistair, agobiándose con la idea de que, quizás, pudo haber defendido la escuela. En su lugar estuvo protegido dentro de su propio laberinto hasta que fue sacado del mundo por completo. No le parece justo, aunque recordar la ausencia de toda su familia se hace sentir peor.

El demonio no se da cuenta de su entorno hasta que Hunter lo jala del brazo hasta unos arbustos, su boca cubierta por el rubio mientras observan un par de estrellas sobrevolando la zona. Los espías de El Coleccionista son distintos, bastante afilados y metálicos en apariencia, agresivos en comparación a las adorables formas que invaden las Islas.

Matt los guía para poder alejarse de aquella zona. Alistair y Hunter no comparten palabra en ello.

Pronto alcanzan el camino principal hasta la escuela. Alistair pierde el aliento al ver la fachada del edificio, con varias grietas y distintas sustancias desconocidas alrededor. Las ventanas estaban todas tapiadas con madera. Algunas columnas habían caído en esos meses.

Skara y Matt siguen caminando hasta las escaleras de la entrada, apresurándose para desarmar una barricada puesta delante del portón. Matt mueve una tabla que tiene escrito “No se permiten no-marionetas dentro”.

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⏰ Última actualización: Mar 03 ⏰

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De plumas doradas | Hunter x Male!OCDonde viven las historias. Descúbrelo ahora