Fate: Percy Jackson

La búsqueda de los hermanos

Thalia había conseguido hacer algo que a Percy se le escapaba. Solo había movido ligeramente la mano y los dos profesores había estado de acuerdo con que dejaran pasar a los tres adolescentes como si nada.

Él le preguntó a la hija de Zeus que era lo que había hecho para que los dejaran pasar a lo que ella solo contestó.

- He manipulado la niebla. - Dijo ella como si fuese lo más normal. - ¿Quirón no te enseñó?

Eso solo hizo que Percy se hiciese una nota mental de preguntar a Quirón si él también podría aprenderlo. Dejando el tema de lado por el momento los chicos fueron junto con los dos profesores hacia el gimnasio y en el camino se encontraron con Grover el cual se sorprendió cuando vio a los adolescentes solo para ganar una mirada extraña de los profesores y unas palabras que indicaban que debía saber que estaban allí ya que eran los ayudantes para la organización del baile.

En ese momento, Grover, hizo como que se acordaba del tema y les guio al gimnasio. Durante el camino Grover les contó que había conseguido entablar cierta amistad con uno de los chicos, el cual tenía cierta fascinación en un juego de cartas llamado mito-magia.

También les dijo que ellos no tenían especial interés en el baile, por lo que iban como otros estudiantes que pasaban del tema, es decir, con ropa normal. Por lo que no estarían en medio de la sala dando una exhibición de sus buenas dotes de danza.

Cuando llegaron al gimnasio Thalia arrugó la cara por la música que estaba sonando ganando la sonrisa de Annabeth y una ofendida por parte de Grover.

- Por los dioses G-man, deberías haber puesto a Green Day. - Dijo Thalia mientras tiraba del sátiro. - Me llevaré a Grover para la mesa de mezclas, Annie, tú y Percy dar una vuelta por aquí a ver si encontráis a nuestros chicos.

- Tienen el pelo negro y la piel muy pálida, parecen enfermos a primera vista. - Dijo Grover mientras lo alejaban de los dos adolescentes restantes.

Annabeth miró al chico, el cual parecía un poco nervioso.

- ¿Qué pasa sesos de alga? - Dijo Annabeth ganando la atención de Percy. - No me digas que no sabes bailar.

- Digamos que cuando se hacían los bailes de primavera en mis institutos yo me quedaba apartado jugando al baloncesto con algunos otros que no querían ir pero que era obligatorio. - Le dijo el hijo de Poseidón. - Por lo que nunca me vi en la obligación de aprender a bailar.

- Por el momento deberíamos mezclarnos con el ambiente. - Dijo la hija de Atenea. - Por lo que bailar sería la mejor opción, solo sigue mi ritmo y si tienes que mirar tus pies hazlo, así no llamaras mucho la atención.

En un primer momento le pareció un buen plan, pero luego ese pensamiento desapareció cuando vio la sonrisa en la cara de Annabeth, era obvio que la rubia quería reírse un poco de las dotes artísticas del chico, y en efecto, fue así. El baile que habían hecho fue muy básico, pero cuadraba para las expectativas de un baile de instituto donde los chicos estarías más pendientes de hacer oras cosas con sus citas en vez de bailar.

- No te rías de mí. - Dijo Percy con la cara como un tomate. - Sabía que le tenía que haber pedido ayuda a Shirou.

- ¿Él sabe bailar? - Preguntó la rubia curiosa. - En el campamento solo se limita a hacer tareas menores, ayudar a los hijos de Hefesto y meterse en el bosque para entrenar.

- Una vez fue al baile de invierno con Rin y los dos bailaron bastante bien. - Dijo Percy mientras miraba a su alrededor con la intención de encontrar a sus objetivos. - De seguro él podría darme un par de consejos.

- Bueno, por el momento hagamos que vamos a por un poco de ponche, con un poco de suerte encontraremos a los hermanos. - Propuso Annabeth ganando un asentimiento por parte del hijo de Poseidón.