Radditz no se daba por vencido, buscaba el Ki de Vegeta, hasta que por fin lo sintió, el saiyajin sonreía pero a la vez se sorprendía porque el Ki que estaba peligrosamente cerca era el de... la actitud pícara del saiyajin llamó la atención de Nappa. —¿A ti que te pasa?.— Radditz notaba la curiosidad de Nappa y negaba con la cabeza, ya sabía todo lo que pasaba en Yardrat, ahora tenía una buena y una mala noticia que darle a Bulma.... ¿O no ? —Protégeme señor con tu espíritu.— Radditz caminaba esperando no toparse con la peli azul . —Protégeme señor con tu espíritu.— ingresaba con mucho cuidado a la cocina para no ser visto, el miedo de encontrarse con la mujer no superaba su hambre, así que se arriesgara pero enfrente de él, Bulma. —¡Ay! no me protegió.—
—Radditz.— sonreía la científica, —¿Qué pasa? ¿Tienes noticias de Vegeta?.— El saiyajin se quedó parado en seco y una gota de sudor recorría su frente, abría los ojos como platos y es que mentirle a Bulma era lo más complicado del mundo, sobre todo, él no sabía mentir, estaba acorralado, atrapado, acabado y todo lo que significa su inminente destrucción. -¡Sí! ¡Bulma! No esperaba verte por aquí.— el saiyajin dijo lo primero que se le ocurría. —Que tonto eres, es mi casa, claro que estaré aquí.— La mujer lo miró con alguna duda. —¡Ay si es cierto! es tu casa si... —Radditz intentaba esquivar la mirada buscona de la peli azul. —¡RADDITZ!— Gritaba la mujer. —¡MAMÁ!.— Saltaba el saiyajin al escuchar el grito de Bulma. —¿Que estás ocultando?— Era estresante para Radditz y se tapaba la boca para no decir nada.
—Mira, yo te explico, ven, acercércate, yo te explico. — Radditz intentó ganar tiempo para dar la buena y la mala noticia a la humana, Bulma entrecerraba los ojos y subía una ceja mientras cruzaba los brazos. —¡Encontráste a Vegeta!— Exclamaba la joven mientras el saiyajin afirmaba con la cabeza pero no quería decir más. —¡Que bueno! ve por ellos, tu te puedes teletransportar ¿verdad? Creo que Nappa dijo que sienten el Ki y pueden llegar hasta ellos o algo así.— Entonces Radditz se ponía azul "Que no me pida llevarla ahorita, por favor," —¿Y si me llevas contigo?!. Sería una línda sorpresa para Goku y Vegeta que fueramos por ellos ¿No Crees?.— Bulma se emocionaba pero Radditz negaba, —Es... que..... hay malas noticias.— Radditz intentaba pensar rápido, pero la humana era mas habil, su mirada era asesina. —¿Malas noticias?. — la chica se acercaba a Radditz amenazante y le daba un buen tirón de orejas. —¡HABLA DE UNA BUENA VEZ!.— la mujer enseñaba los dientes furiosa y el pobre guerrero solo chillaba.
— No puedo teletransportarme tan lejos, aún no tengo tanta práctica!.— Radditz dio la excusa que se le ocurrió, en verdad sí podría teletransportarse en ese instante... pero no era... "correcto" —Ay entonces seguro que Pybara podría traerlos, ¿Hay manera de contactarlo?... Puede que Nappa sepa.— La científica se ponía a pensar en la manera de contactar con el patriarca de Yardrat, avanzaba a buscar a Nappa, quien le diría que si había manera, pero no convenía hasta que él hablara con Vegeta. — ¡NO!.— El guerrero tomó a Bulma de los hombros pensando en una excusa creible. —¡DUENDES!—
—¿Qué?.— La mujer abrió los ojos y pestañeaba, no entenía lo que decía Radditz. —Fueron los duendes, ellos... seguramente raptaron a la rubia, por que... se... si... se roban a las mujeres. — Radditz tenía cara de nerviosismo, la mujer más inteligente de la tierra no le creería jamás una excusa tan tonta. —¡Ay no!, ojalá se encuentre bien, Lazuli es muy fuerte, no creo que le pase nada, pero a mi me podrían hacer daño... mejor esperamos los aquí. Con que sepa que está bien es suficiente.— El saiyajin no lo podía creer, tenía que ir a Yardrat en cuanto se quitara de encima a la humana.
En Yardrat, después de horas de sueño Vegeta despertaba sin recordar bien que había sucedido, sólamente estaba peleando con Freezer, luego nada, una serie de sueños locos y despertaba ahi y no estaba solo, la rubia estaba durmiendo recargada de su cama. —¡Muchacha! ¡Despierta! ¡¿Qué demonios crees que haces aquí?! — Sacudía a 18 y ella despertaba lentamente. —Ash, estaba durmiendo, que malo eres.— Se estiró y sonreía al verlo. Vegeta estaba confundido, ni siquiera sabía exactamente dónde estaba hasta que un Yardratiano médico entró a visitarlo. —Joven Vegeta, es sorprendente lo rápido que se recuperó.— El médico llevaba un preparado de hierbas medicinales que le ayudarían a terminar de sanar, mientras tanto escuchaban un fuerte grito en la habitación contigua. —¡AY AY AY NOOOOO AGUJAS NOOOOOOO!.— Goku gritaba desesperadamente, Vegeta y Lazuli no podrán evitar reír al mismo tiempo. Se miraron y Lazuli se sonrojaba levemente, Vegeta apartaba la mirada. —¿Dónde está el otro humano?.—El saiyajin preguntaba para cambiar de ambiente, no le gustaba sentirse extraño con una mujer extraña. —Yo que se... dijo que entrenaría con Pybara o algo así.— Lazuli subía los hombros, no le importaba el entrenamiento.
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Un amor de verdad
Fanfiction¿Qué pasaría si Bulma pidiera su deseo original de un novio guapo que la quiera? Ella consigue su deseo y se encuentra con serios peligros y un amor que se sellará para la historia.