Una moto de agua se acercaba a Kame house, pronto se lograba divisar un par de figuras, eran Yamcha y Puar. Krilin los había invitado a entrenar, lastimosamente para Yamcha, en la isla se encontraba su ex novia con el alíen desgraciado que había traído el Dios Dragón, y como cereza del pastel, acompañado de otro alíen. La fiesta así no era agradable. Para Vegeta era bueno ver un nuevo saco de boxeo, tal vez le podría dar un par de golpes "accidentalmente", no tenía realmente nada en contra del humano sin diente, pero era divertido molestarlo y sinceramente le caía mal.
—¡Yamcha!, que bueno que te decidiste a venir, con el entrenamiento que estamos llevando, seguramente ganaremos el próximo torneo de las artes marciales.—sonreía Krillin y al parecer era el único feliz por la presencia del humano.
—¡Hola Krilin!, ¿Acaso creías que me iba a quedar atrás?— posó sus ojos en el príncipe, con desagrado y rechazo a su real presencia. Actitud que Radditz no dejaría pasar por alto, nadie osaba mirar así a su príncipe, veía una clara oportunidad para fastidiar y a la vez, divertirse.
—¡Uh!, mire, principe, tenemos un nuevo costal de papas, ¿me permite los honores?.— Radditz de inmediato puso a Yamcha en su mira y sonrió malignamente, estiró sus músculos y tronó sus dedos para calcinar vivo al infeliz que se atrevía a faltarle el respeto a su alteza.
Vegeta volteó a ver a Radditz muy divertido, sería una escena graciosa ver a su soldado correteando por toda la isla. Más aún, los gritos de niña del humano inservible. Sonrió con la misma actitud perversa. —Por mí, ¡haz lo que quieras!.— se cruzaba de brazos alistándose para la función.
Radditz asintió y comenzó a caminar rumbo a Yamcha, el pobre ladrón de desierto tenía cara de pánico, sudor frío corría por su frente y su espalda, estaba inmóvil del terror que causaba semejante ejemplar saiyan acercándose amenazante. Era como si una hiena acechara con la seguridad de que conseguiría la presa.
—¡Radditz!, algo más.— interrumpió el príncipe, haciendo que el señor pelucas volteara a ver a su príncipe. —No lo mates a la primera ¿quieres?, deseo ver un poco de sangre correr antes.— Ambos soltaron una carcajada, Vegeta mantuvo la sonrisa. por su parte Radditz comenzó a perseguir a Yamcha por toda la isla.Bulma observaba desde la seguridad de la casa, no sabía si reír o llorar, era muy graciosa la cara de Yamcha huyendo, se lo tenía bien merecido. Pero esperaba que no lo fueran a lastimar, tanto. Goku y Krillin se quedaron mirando lo que sucedía, Krillin estaba horrorizado y pidió por ayuda.
—¡Maestro!, tiene que detener esto, va a ser una masacre.—Rogaba el enano sin nariz a su maestro, quien decidió tomarse su tiempo, era la hora del té y deseaba terminar su aperitivo antes de levantarse.
—¡No molestes muchacho!, ¿Qué no ves que estoy ocupado?.— el anciano mordía una galleta de canela cubierta de azúcar y la disfrutaba con su té negro, no se distraería con Yamcha, ese té se debe tomar caliente.
Radditz perseguía a Yamcha, quien corría de un lado a otro escondiéndose. Vegeta moría de la risa y Krillin ya no soportaba, pensaba que iba a matar a su amigo, ya había asestado un par de golpes y atinado algunos ataques de energía. Yamcha estaba a punto de rendirse, subió las manos en señal de ya terminar con el juego, tenía el labio roto, heridas en brazos y piernas, una gran cortada en la mejilla y uno o dos chichones.
—¡Ya, ya, me rindo!, tú ganas, por favor, no me mates.—Cerraba los ojos el pobre humano, derramaba lágrimas y temblaba.
Radditz rió juntando poder para terminar al terrícola, cuando Goku le hizo frente, se puso de pie y gritó. —¡Hermano!.— Lo atacó con un kame hame ha desde su posición y desvío la energía que iba directa a aniquilar a Yamcha.
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Un amor de verdad
Fanfiction¿Qué pasaría si Bulma pidiera su deseo original de un novio guapo que la quiera? Ella consigue su deseo y se encuentra con serios peligros y un amor que se sellará para la historia.