Puntos suspensivos

Capítulo 7

Adeline

Me había prometido que solo leería hasta las diez, ya que al día siguiente tenía clase a las siete, y ahora era casi las una de la mañana y yo estaba intentando no arrojar el libro de Leo por la ventana.

El mensaje de mi padre deseándome buenos días, cosa que siempre hacía cuando estaba por irse a trabajar para que sea lo primero que viera en el día, fue lo que me hizo obligarme a dejar aquel libro.

Tenía muchas cosas por comentar, lo que me tenía impaciente porque Leo terminara el libro que yo le presté para que comenzara este. Y aquello me emocionaba más, pues por fin tendría a alguien con quién hablar sobre libros.

Mis amigas decían que no les molestaba que lo hiciera, pero sabía no era un tema de su interés, así que lo evitaba. Mi padre, por otro lado, es quien normalmente tenía que soportar mis pláticas, pero sabía que a estas alturas ya era experto en asentir en los momentos indicados sin tener que prestarme realmente atención. A veces también hablaba con Sharon, la pareja de mi padre, ya que ella también leía, aunque nos interesaban historias muy diferentes.

Al quedar la habitación a oscuras, vi que afuera aún estaba la luz encendida, así que dejé la comodidad de mi cama para ir a apagarla. Pero al salir, vi a una Lyssandra encorvada sobre la computadora sentada en el sofá.

⸺¿Quieres una taza de café? ⸺le ofrecí.

Ella volteó sobresaltada, y al verme, asintió con una sonrisa cansada.

⸺Creí que ya estabas por terminar⸺ comenté poniendo la cafetera.

⸺Y así era⸺ exhaló. ⸺Pero olvidé que tenía un trabajo para la academia, así que...

Coloqué la taza frente a ella.

⸺¿Quieres compañía? Aún no tenía planeado acostarme.

Lo dudó solo unos segundos en los que tomaba el café.

⸺Sería lindo.

Regresé a mi habitación y tomé el libro. Así, Lyssandra en uno de los sofás terminaba su trabajo mientras yo en el otro continuaba mi lectura.

Entendí por qué Lyssandra había aceptado mi compañía cuando por tercera vez tuve que recordarle que se suponía estaba haciendo un trabajo. Jamás había conocido a una persona que se distrajera tanto con tan poco.

A pesar de aquello, no tardó mucho en avisar que había terminado cerrando de golpe y dejando de lado su computadora.

⸺No quiero saber nada más de historia musical en mi vida⸺ reclamó tallándose los ojos. ⸺Gracias por quedarte.

⸺Cuando quieras.

Intercambiamos una sonrisa.

⸺Me alegro mucho de haber convencido a Alec de que tú fueras nuestra compañera⸺ admitió.

⸺¿A qué te refieres? ⸺ pregunté sentándome en el sillón en el que estaba.

⸺Alec quería que fuera otra chica la que rentara la habitación⸺ explicó. ⸺No que no le guste que estés con nosotros o que se arrepienta de tenerte aquí⸺ se apresuró a agregar.

⸺No lo estaba pensando⸺ mentí. ⸺¿Puedo preguntar por qué?

⸺¿Por qué te quería a ti, o por qué Alec no lo hacía?

⸺Ambas⸺ me atreví a responder, aunque sonó más a una pregunta.

Lyss se acomodó para quedar sentada con su cuerpo hacia mí. Se quedó pensando un momento, buscando la forma de empezar.

⸺Alec y yo decidimos salirnos de nuestras respectivas casas unas semanas antes de que el semestre empezara. No sé si te lo habías preguntado, pero es por eso por lo que Leo no vive con nosotros, él ya había renovado su contrato para el siguiente año. Además, sé que nos quiere y todo, pero es evidente que le gusta vivir allá donde tiene su propio pequeño espacio para estar. ⸺Se encogió de hombros restándole importancia. ⸺Como sea, ya me salí del tema⸺ se disculpó. ⸺¿En qué estaba?

⸺Tú y Alec tardaron en decidir vivir aquí.

⸺Ah, sí. Una vez encontramos este lugar, que igual fue por pura suerte⸺ agregó. ⸺Nos pusimos a buscar un compañero. Después de que supiéramos que Leo no era una opción, le preguntamos a Pol. Pero él parece estar muy bien viviendo con sus padres. Y no lo culpo, realmente es como vivir solo por lo mucho que viajan por trabajo de su padre. Aunque si me lo preguntas, para mí era una razón a nuestro favor para que viviera aquí. No me gusta que siempre esté solo en su casa, pero supongo que ya está acostumbrado después de tantos años, aunque aun así...

⸺Lyss⸺ la detuve. Sentía que estaba recibiendo información que no necesitaba saber.

⸺Lo siento. No volverá a pasar⸺ aseguró, aunque la sonrisa que compartimos era señal de que ambas sabíamos que lo más seguro es que sí que volvería a pasar. ⸺Para no hacer la historia larga, no teníamos mucha fe en que recibiéramos muchas propuestas considerando que ya estaba por iniciar el semestre, y así fue, llegaron como cinco, creo, aunque al final solo hubo dos candidatas.

⸺La chica que Alec quería... 

⸺Y a la que yo quería⸺ me guiñó el ojo. Exhaló encorvándose un poco recargando sus brazos en el cojín sobre sus piernas. ⸺Alec tenía buenas razones para querer que se quedara la otra chica. Ella es de una ciudad de por aquí, y quería rentar la habitación para los siguientes tres años, eso nos evitaría el buscar a alguien una vez que tú regresaras a tu país. Y era un muy buen punto. Incluso yo estaba de acuerdo al principio.

⸺¿Y qué cambió? ⸺las comisuras de su boca se alzaron con calidez.

⸺Decidimos llamarlas y hacer una pequeña investigación.

Mi mente se fue a aquella noche en la que Lyssandra me pidió si podíamos hablar. Yo estaba demasiado nerviosa, pues sentía que iban a analizar cada palabra que les dijera, y parece que no estaba tan alejada de la verdad.

⸺Yo era quien hablaba, Alec solo estaba ahí escuchando. Primero hablamos con la otra chica, quién en verdad parecía agradable. Pero cuando te llamé y tuvimos aquella conversación, no lo sé⸺ se encogió de hombros. ⸺Supe que te quería a ti como compañera. Además, me gustó tu acento. Así que después de esa llamada pasé días rogándole a Alec para que te aceptáramos a ti.

Algo dentro de mí dio un vuelco. Lyssandra me había escogido porque sí. No tuve que probarle nada, solo había sido una corazonada.

En aquella conversación, que no duró más de cinco minutos, se habló del departamento. No de nosotras como personas ni nada parecido. Y solo eso fue suficiente para que ella sintiera que debía de estar ahí.

⸺Así que lo siento si esperabas una mejor historia, pero solo fue eso, hablé contigo ese día y quería tener la oportunidad de conocerte más.

⸺Espero no estarte decepcionando.

⸺No por el momento, ya veremos después⸺ bromeó.

Después de aquello nos pusimos de pie para dirigirnos a nuestras respectivas habitaciones, pero antes de entrar, me detuve para verla abrir su puerta.

⸺Lyss. ⸺Se giró. ⸺Para mí es una gran historia.

Me regaló una sonrisa tan sincera que me detuve para asegurarme que no la estaba imaginando.

⸺Buenas noches, Addie.

⸺Descansa.