Strangers +18 - Pedri González

No juegues +18

NARRA PEDRI

Maddy se había pasado el día anterior ayudando a mi madre.

Y yo que creía que no podía estar más enamorado de ella.

Mi madre, en cambio, no había dejado de hablar de ella desde entonces.

Maddy esto, Maddy lo otro.

Estaba en la cocina con ella y Fer.

Hoy el restaurante estaba cerrado.

Llovía un poco y el día estaba algo malo, así que como mis padres se iban esa noche a casa de unos amigos, nosotros nos quedaríamos en el salón mirando películas.

Había ganado, por culpa de mi hermano y de Maddy, ver Harry Potter.

Y mi madre se había ofrecido a hacernos cosas para comer antes de irse.

Y Fer y yo le estábamos ayudando.

Maddy y Sira estaban en el salón, junto a Ferran, preparando las películas y cogiendo mantas y todo o necesario.

- Todo listo, ¿os portaréis bien? -preguntó mi madre, mirándonos a ambos.

- Vete tranquila. -le aseguró Fer.

Ella asintió y nos dio un besito a cada uno, saliendo de la cocina y yendo a por nuestro padre.

Escuchamos como se fueron y al rato, Ferran entró corriendo a la cocina.

- Creo que tenemos un problema. -murmuró, rascándose la cabeza.

Miré a Fer con cara de pánico y los tres salimos corriendo.

Maddy y Sira estaban discutiendo con Julia.

- ¡He dicho que no vais a ser damas de honor y mucho menos venir a mi boda! -gritó Julia.

- Estamos invitadas y nadie quiere ser tu dama de honor. -le gruñó Sira.

- Como si quisiera ser eso. -se rio Maddy.

- Solo tendré una dama de honor y no pienso discutirlo, no vais a venir. -se quejó de nuevo.

- ¿Eso no tendría que decidirlo Pedri también? -preguntó Maddy, de brazos cruzados y una ceja levantada.

- ¡Es mi boda! -gritó Julia.

- ¡Vuestra boda! ¿te casas sola? -le gritó Sira.

- ¿Por qué me da la sensación de que estamos discutiendo con una pared? -preguntó Maddy, girándose hacia nosotros.

- Porque lo es. -le contestó mi hermano.

Maddy soltó una carcajada.

- Pedri, tenemos que terminar de preparar la boda, los preparativos y tu estás aquí con esta gente, ¿podemos ir arriba? -me miró a mi, Julia.

- Esta gente son mi gente y vamos a ver películas, mañana ya arreglamos lo que falte. -le contesté.

- No pienso ver esas películas, son aburridas. -se quejó, cruzándose de brazos.

- Pues como tu y nadie se queja. -le sonrió Maddy de forma irónica.

- Yo sí me quejo. -apuntó Fer y todos soltaron una carcajada.

Esto era un desastre.

No quería casarme.

Quería que Julia se fuese.

Pero no podía echarla y romper todo mi futuro y el de Maddy.

Tenía que aguantar.

Maddy y mi hermano fueron los primeros en sentarse en los sofás, seguidos de Ferran y Sira.