26. EXTRA DOMINGUERO

45 4 1
                                    

Lilith

Tres días en Dubai y aún no logro desfrutar lo que los demás si, todos han bebido, bailado y follado cuanto han querido, bueno en realidad Tamar.
y laika quien a solo horas de haber pisado el suelo arabe ya tenía a su primera víctima.

— vamos a la piscina —  pide Mila quien ha estado conmigo todo el tiempo.

— crees que esté bien que use el traje de baño que me dio laika — lo tomo en mis manos viendo la pieza extremadamente pequeña.

— es lindo y tienes el cuerpo para lucirlo. — me anima y lo pienso por un momento porque nunca he usado algo tan sugerente y atrevido — yo voy a usar lo que ella me dio.

— creo que no debimos dejar que ella eligiera nuestros trajes de baño en Moscú — miro a Mila quien tiene un traje que no deja nada a la imaginación.

— bueno pues a mí no me importa voy a ir y voy a nadar un rato, hoy vamos a bailar y no voy a permitir que de nuevo te niegues y te encierres   en esta habitación como una anciana de 80 años.

Ruedo los ojos, no veo cuál es el problema en que yo no quiera salir.

— está bien hoy voy a salir con ustedes pero no me vayas a dejar sola — advierto — aunque igual no creo que podamos alejarnos mucho, los berkserks siempre están vigilando.

— están cuidando de todos que es diferente — baila mi amiga — pero está bien no te voy a dejar sola, solo quiero bailar y ya.

Me pongo el traje a regañadientes y encima de él una bata de baño para tapar lo que más pueda, no quiero que me miren mal, por exibicionista.

— lo de la bata es buena idea, he estado leyendo sobre esta cultura y son muy recatados así que es mejor que no mostremos mucho — habla Mila con mucho interés.

Sin embargo a mí me salta una duda, está playa es privada como es que han venido más personas y más que todo hombres a pasarla, «si soy estúpida obviamente es la loca de laika».

— ¿Donde lees tu? — la miro arrugando las cejas, es peligroso que nos vean teniendo contacto con el mundo pues aunque Tamar ahora es parte de la mafia nosotras seguimos siendo esclavas.

— no me mires así,  laika me ha dejado ver en su iPad — se defiende — no he buscado a mi familia ni nada de eso si es lo que te preocupa.

Asiento eso es lo que más temo, mi hermana y yo no tenemos a quien llamar, pero Mila si tiene unos hermosos padres amorosos que han de extrañarla mucho y eso puede ser tentador para ella, el querer buscarlos y hablar con ellos para que ya no sufran al saberla desaparecida.

— por cierto — me saca de mis pensamientos — estuve investigando y no me han buscado, tampoco salieron avisos míos de desaparecida, ¿No te parece muy extraño?.

— la verdad... Si — apretó mi bata porque siento que alguien me mira — pero puede que no hayas buscado bien.

Sin prestarle más atención a los acontecimientos llegamos hasta la zona de las piscinas y si. Me apetece darme una zambullida en el agua, el calor es insoportable sin importar con la tecnología que cuentan en el lugar para refrescarnos.

Sigo sientiendo que alguien me mira pero por un breve momento me siento libre, disfruto el agua sobre mi cuerpo y veo en el bar que hay en medio de la piscina diferentes tipos de licor. No lo pienso dos veces y corro a tomar algo, tomo la primer botella que veo y la abro llevándola a mi boca, bebo como si se tratara de agua, mi garganta se siente contraída por el sabor rasposo y fuerte que baja y no me detengo apesar de que siento fuego que quema mi lengua y baja haciendo cenizas mi interior.

SIN PUDOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora