15. AMENAZA

39 3 0
                                    

Moscú Rusia 20 horas antes del atentado

Alek kovalenko

Las amenazas y las traiciones suelen siempre llegar de las personas que menos lo esperamos, hasta hace poco crei que Luka sería mi enemigo y que seguiria en una guerra con la mafia italiana, pero me veo gratamente sorprendido porque en sus ojos sigo viendo a ese niño con el cual solía jugar antes de que todo se fuera a la mierda.

— ¿te gusta la esclava verdad? — me sonríe — no tiene sentido negarlo, y no te culpo es linda.

Sus palabras causan molestia en mi que solo quiero que sea mía y de nadie más.

— aunque es más linda la otra para mí gusto — mira a la hermana de tamar — ¿cuántos años tienen?

— las dos tienen 18 — respondo esperando la mirada de "eres un pervertido"

— ya pueden tomar sus propias decisiones entonces — me mira a punto de reír — somos unos pervertidos, pero si no las obligamos a nada yo estaría dispuesto a cuidar de ella.

— te olvidas de que es mi esclava y no pienso venderla — recalcó

Si lo hiciera tamar jamás me lo perdonaría, me he dado cuenta que ama y trata de cuidar a su hermana lo más que puede.

— no quiero comprarla — mueve sus cejas — quizá, enamorarla, pero eso será cuando esté todo calmado sabemos que en nuestro mundo esposas e hijos son los blancos de el enemigo.

Suelto una carcajada

— ¿te quieres casar con mi esclava? — río porque en este mundo las esposas son blancos y es mejor estar solos a sufrir la pérdida de la persona a la cual se ama.

— claro que no, — frunce el ceño — por eso me voy a ir a Italia muy juicioso a seguir con el plan y voy a dejar a tu esclava tranquila.

Asiento entre risas, y me gusta recuperar ese amigo que creía perdido por cosas del destino, tenía planes de cómo lo iba a cortar en pedazos para alimentar a mis lobos pero... Ya que llegó con muy buenas propuestas me quedo mejor con su amistad.

— he estado investigando y tengo información sobre los búlgaros — me mira — Emil va a tomar el poder en dos días y quiere a la bratva trabajando para el 

Lo sabía ese maldito traidor traía algo entre manos y no me sorprende lo que ha pasado los últimos días con las mujeres me deja claro que busca información de la organización.

— es demasiado estúpido — me río — querer enfrentarse a mi, que se todos y cada uno de los negocios de su mafia, además no soy ningún estúpido, por ahora no quiero que intervengas en nada, quiero que siga creyendo que somos enemigos, no tengo duda que en cuanto tome su cargo va a buscar aliados y obviamente buscará a mis enemigos.

— de acuerdo cuenta conmigo — hace un gesto de fastidio — Emil es un mal nacido que disfruta torturar infantes — apreta  los puños — eso me asquea

Desafortunadamente cuando hay guerras de mafias tenemos que ir por los puntos débiles y esos casi siempre son los hijos y yo no soy el jefe de la mafia roja por ser benevolente, he tenido que tomar vidas de niños que no tienen la culpa de tener padres hijos de puta y esa es la razón por la que no quiero hijos, el solo pensar que puedan caer en manos enemigas me retuerce las entrañas. Aunque Emil lo hace solo por placer, sus actos asquerosos nada tiene que ver con ajustes de cuentas, el disfruta hacerlo y al igual que con las mujeres primero los viol..... El solo pensar en eso me llena de rabia y me gusta que quiera revelarse porque antes debía aguantar por la paz que hemos tenido con los búlgaros por años, pero si el inicia la guerra puedo hacer limpieza y eso me gusta mucho.

SIN PUDOR Donde viven las historias. Descúbrelo ahora