--Capítulo 9--

50 2 0
                                        

Parecían ser escaleras bastante profundas, ya que a pesar de haber estado un rato caminando, estas no habían llegado a su fin.

Eran unas escaleras de caracol hechas de piedra, aparentemente infinitas o eso era lo que a mi me parecía.

Mis pies se mostraban cansados, ya que el calzado no era el adecuado para bajar escaleras, son más para ser lucidos en una fiesta y poco más.

No sabía cómo sería el ambiente del lugar donde iba y cada vez que bajaba un escalón me lo imaginaba.

Las miles de cosas que podrían pasar o lo que podría ver, pero muchas cosas a veces son inimaginables, porque tu cerebro no es capaz de pensarlo, así que nos quedamos con las ganas de saber, hasta que llegue el momento.

No me acordaba si había ido a una fiesta o algo por el estilo, pero bueno nada podía hacer.

Olvidar tu pasado puede ser algo duro o algo que desees.

Hay veces que me lo planteo.

Mi yo pasado quería olvidar o no.

Quería recordar o dejar caer en el olvido todo.

¿Y si cuando recupere la memoria quiero volver a olvidar?, y todo se vuelve un ciclo de olvidos y recuerdos.

Ojalá poder hablar con tus sombras pasadas y saber que es lo que deseaban o hablar con sombras futuras que te digan cual es la mejor opción.

Todo es un lío, pero bueno mejor dejar este tema a otro lado y seguir en el presente, no podía marearme mucho la cabeza ahora.

Por poco que fuera, ahora tocaba disfrutar.

Y habría momentos para rayarse la cabeza.

Estuve algo más caminado hacia abajo sin parar y afortunadamente ya encontré el final, que daba a una puerta redonda abierta.

Nada más entrar luces de color verde estaban por toda la habitación, montones de personas estaban bailando y la música estaba muy pero que muy fuerte.

Me adentré algo más y vi un escenario que se encontraba más adelantado que el pelotón de gente.

En él se encontraban 5 personas, 4 chicos y 1 chica.

Me aproximé más, metiéndome entre medio de todas aquellas personas.

Y gracias a eso vi con más claridad a la chica que tenía una guitarra y micro.

Chica de ojos rojos, negros y estilo que gritaba Adi, claramente era ella, y si te fijas el baterista era el chico de pelo rapado que vi la última vez .

Después había un chico de pelo largo y negro y otro de mismo color de pelo.

En el escenario todos desprendían la misma sensación de ser una nota más de la canción.

Todos tenían pelo negro y miraban a sus instrumentos y al público con unos ojos que desprendían un brillo que indirectamente aterraba, uno que era algo rojo.

El que tocaba el bajo era el de pelo largo y se veía como lo tocaba sin dificultad alguna, al igual que el resto de los integrantes del grupo.

"And you gon' have to do it at my tempo"

Se escuchó y fijé mi vista en el cantante.

La voz del que cantaba me gustaba demasiado y con esa canción quedaba demasiado bien.

De repente Adi empezó a cantar junto a él y fijó la vista en el público.

Creo que me vio, pero no estoy segura, ya que es la típica mirada que crees es dirigida hacia ti, pero hay 700 personas más como para confirmarlo.

Rurnore: OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora