---Capítulo 33---

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18/03

Un vestido de color rojo y distintos tipos de tela apareció en mi cama al yo entrar.

El vestido se despliega con la majestuosidad de una rosa roja, con capas que caen como pétalos. Su corsé en la parte superior añade un toque de elegancia, creando una imagen de sofisticación y gracia floral.

Se podría decir que sus pétalos eran las miles de capas que podía tener a la perfección, siendo dos totalmente visibles, ya que la tela que se encuentra por encima, que es más satinada, tiene un corte que deja al descubierto otra capa del vestido de un color rojo granate.

Al lado del vestido podía verse con facilidad una caja roja.

Al abrirla su interior era aterciopelado y contenía una máscara negra, con encajes en sus bordes y una pluma que se encontraba en el extremo derecho superior.

Me quedé embobada, no me creía que fuera a llevar un vestido así, pomposo, bonito y tan perfecto.

En dos días solamente podría vivir la ocasión más importante del año.

20/03

Me veía reflejada en el espejo, con el corsé ya ajustado con un lazo de cuerdas rojas suaves.

Mi pelo alisado, pero con unas leves ondas en el final y suelto por completo.

En breves todos los estudiantes, maestros e integrantes de la escuela estarían dirigiéndose a la "sala de la rosa blanca".

Digamos el lugar entre comillas porque no es ese, pero hay que hacernos el que sí.

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Cuando llegué la sala era totalmente igual, a la antigua, todo tal cual lo vi aquel día, pero en mejores condiciones, y quitando aquel cuadro del que solo vino una de sus esquinas inferiores.

En la entrada estaban esperando Ace, Silas y Adira.

Me acerqué.

Ace y Silas iban vestidos con traje de chaqueta, mientras que Adi llevaba un vestido azul marino de capas y capas de tela, entre ellas algunas de tul y la parte superior encorsetada, y mangas abullonadas de tul.

Todos los rostros en la habitación estaban cubiertos por máscaras, unas más llamativas que otras.

Las más extravagantes con plumas y encajes enormes, las menos eran de colores lisos y sin pedrería , plumas, encajes...

Todo el mundo estaba mirando al palco, esperando a que ocurriera lo mismo que en los ensayos, yo no me acordaba muy bien, no prestaba atención cuando los practicábamos , así que si no sabes lo que tienes que hacer intenta copiar al resto y deja que ocurra.

Pronto las velas de las lámparas de techo bajaron su intensidad, haciendo que el palco quedara más iluminado, y sus retoques dorados brillaran aún más.

Se asomó por este el rostro de la directora, una vez asomada por completo comenzó a hablar sin parar dando el discurso más largo de la historia, me aburrí y discretamente me fui.

Salí al pasillo y estuve ahí un rato.

Cuando estaba lista para entrar, ya que pensaba que la directora se había callado, escuché un ruido en la pared izquierda del pasillo, al momento las luces parpadearon y sombras se dibujaron por todas esas paredes, iban apareciendo y desapareciendo, algunas era como si estuvieran saliendo por las ventanas, tratando de escapar de algo que las perseguía.

-El ciclo vuelve a repetirse- escuché en forma de un susurro similar al de otras veces.

Entré y todos estaban bailando, ahora me era más difícil encontrarles.

Comencé a bailar con gente que no conocía, me enredaba en los brazos de una persona y pasaba a la siguiente, así durante un buen rato.

No los veía, y no fue hasta que reconocí unos ojos entre un millón y me acerqué más y más rápido.

-Ace- dije elevando mi voz.

Este se giró y empecé a contarle lo ocurrido.

-Mi hermana y Silas se fueron hace un rato- dijo totalmente tranquilo.

-Tenemos que sacar a la gente de aquí rápido- dije con mi voz acelerada.

-Di, si nos ponemos a sacar gente de aquí, vamos a montar un escándalo y nos van a tomar por locos.

Lo miré y con fuego de mis manos quemé una cortina.

-Upps, creo que vamos a tener que terminar el baile antes de tiempo- dije mirando a Ace, luego él comenzó a reírse.

-FUEGO, FUEGO- comenzaron a gritar la multitud.

Tres segundos más tarde de aquello estaba el salón evacuado, todo el mundo a salvo, o por lo menos a salvo fue lo que pensé antes de ver la viscosidad que cubría el pasillo.

Miré a Ace, y claramente pensamos lo mismo.

Ni el día del baile iba a ser tranquilo.

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⏰ Última actualización: Feb 11, 2024 ⏰

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Rurnore: OcultosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora