Capítulo 12

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Pasando la noche y parte de la mañana, Rosé trabajaba en su despacho. Entretenida con la laptop imprimiendo contratos y nominas. Jennie asomo la cabeza por la puerta portando dos vasos de café.

- Hello, amiga! - se sienta muy animada enfrente.

- Hombre! la perdida. No sé nada de ti desde el sábado. No sé lo que estuvieron haciendo en mi departamento, pero espero que no me lo dejaran echo un asco. -

- No estuvimos en tu depa. Chu me llevó a una cabaña en las montañas. Fue una sorpresa y no pude avisarte de que estaba libre. Allí no tenía cobertura. Lo siento. -

- Uhhh, están que no paran. -

- En serio, Rosie. Estoy viviendo el primer año de nuestra relación. Ha vuelto a ser atenta, impulsiva, todo lo que me enamoró de ella. - suspiraba.

- Me alegro mucho, Jen. -

- Pues ya puedes dar saltitos de alegría, porque sé que la culpable de todo esto es Lisa. Chu me ha comentado, por no decir sonsacado, que ella le ha dado los mejores consejos. O sea, que tu amiga mía, vas a tener la suerte de probar directamente de la maestra, si no lo has hecho ya...- insinuó la castaña frotándose las manos.

Rosé resopló por la mención de la pelinegra y se agarró el tabique de la nariz como si de un dolor de cabeza se tratase.

- No me nombres a esa idiota - dice cortante.

- ¿Por qué? ¿Qué te ha hecho? - sorprendida apoyo sus codos en la mesa y esperó expectante a que le contase.

A la rubia le dio vergüenza, pero Jennie era su mejor amiga. Y a ella no le podía ocultar nada, o por lo menos casi nada.

- Almorzó con mi padre y conmigo en la mansión...-

- Eso ya lo sabía. Adelántate a lo importante. -

- No tienes remedio, Jen- río y empezó a contarte toda la odisea de ayer.

- ¿Y? -

-Pues estuvimos a punto de ...- vaciló - hacerlo por primera vez. Quedamos en su departamento y solo me retrasé diez minutos. Cuando toqué en su puerta...- dejo que su amiga terminara la frase.

- ...¿no estaba? - dijo boquiabierta.

- Exacto. Así que se acabó Lisa para mí. - el enfado de anoche se le estaba volviendo a repetir.

- Oh...- alzó un dedo Jennie teniendo una idea. - Véngate de ella. Hazle lo mismo que te hecho a ti. Ponla cachonda hasta no poder más. Para que sepa quién manda. - su tono era malévolo.

- Lo siento, pero creo que me voy a abstener de las citas por un tiempo. - agarro el celular mirando si tenía algún mensaje o algo.

- Me he enterado esta mañana. Ha sido una niña, ¿no? - preguntó la castaña sabiendo que su amiga ya estaba enterada.

- No se. Solo sabía que So-hee había dado a luz. -

- ¿Y ahora qué? -

- Pues tampoco lo sé...- dejo el celular en su sitio y suspiro encogiéndose de hombros.

- Yo ya no te puedo decir más de lo que te he dicho. Puedes escoger lo más difícil o algo más sencillo. - decía en referencia a sus relaciones con Suzy y Lisa.

Rosé negaba con la cabeza, porque tristemente para ella no podía contarle toda la verdad a su amiga. No tenía ni la más remota idea de que lo que decía. Por qué ambas para ella suponían una gran complicación.

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En el gimnasio, una Lisa malhumorada por no descansar bien, se esforzaba en levantar las pesas cuando Jisoo entró y le dio una palmada amigable en la espalda.

Nada comparable a tu amor || Chaelisa G!PDonde viven las historias. Descúbrelo ahora