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Rafael

Caminamos uno al lado del otro por el camino empedrado que conduce hasta la sala de cine, no he dicho una sola palabra en los cinco minutos que llevamos caminando.

Pese a su aspecto físico, es hermosa, aúnque esos ojos perfectos muestren cansancio y dolor, se que hay algo más.

Al llegar pasamos por algunas golosinas para entrar a ver la película, el lugar es cálido y no hay mucha gente...

—-Titanic... que originales.

Tomamos asiento uno al lado del otro, mientras noto como toma una barra de  chocolate blanco y le da una mordida.

—-El chocolate no es bueno para la ansiedad...

—Si como sea, aquí estoy, espero que cumplas luego de ver esta payasada.

—-Siempre cumplo Hera, nunca habías visto Titanic?.—Pregunto.

—-No he tenido tiempo de ver estupideces.—Responde con el humor que la caracteriza..-Me sorprende que la mafia dé tiempo de hacer tonterías cómo estás.

—-Vivir no es una tontería, y si eres feliz haciendo tonterías  pues hazlo.—Respondo mientras la película empieza.—-Actúas como si fueses una señora mayor de unos cuarenta años, acaso nunca has vivido tu felicidad Hera?

Susurro a su lado sin invadir su espacio personal y sin levantar la voz para no interrumpir la película, ella tiene la vista fija en la pantalla y yo por igual.

—-He vivido de muchas formas, pero ninguna que me llene.

Siento por primera vez algo de sinceridad en sus palabras, quiero ayudarla aunque no sé cómo hacerlo, se ha convertido en algo importante para mi, entender a la capitana arrogante. Siento que solo le hace falta abrir sus sentimientos y dejar salir todo el rencor que lleva por dentro. 

—-Por que no lo descubres, eres joven, tienes mucho camino por recorrer, aún estás a tiempo de encontrar tu propio camino.

—-Tu no sabes nada sobre mi.—Musita en tono bajo

—-Puede ser, pero no necesito conocerte más  sobre ti para saber que es lo que buscas en realidad.

—-y que es según tu?.—Esta bes me mira y yo hago lo mismo.

——Ser libre de todas las cadenas que te tienen atada a tu pasado.

Guardo silenció cuando noto el rayo de tristeza en su mirada, ella guarda un dolor muy profundo, más del que me puedo imaginar, ella disimula mirando la película en frente de nosotros.

Los minutos pasan y la tensión se siente pero no es incómoda, pasamos a la escena en la que los protagonistas se conocen, algo que enmarca una sonrisa de lado en la capitana que logró ver en un rabillo de mirada.

A si fue como la salve aquella noche pero no pienso decir nada al respecto, esperare a que ella venga a mi.

Se lo que le paso a la capitana, me atreví a investigar a pesar de estar en una isla lejos de todo y de todos tengo mis métodos y mi padre es mi fuente a la realidad exterior.

Se lo que sucedió el día en que la secuestraron pero lo quiero escuchar de su boca, quiero que confíe en mi, tengo la terrible necesidad de protegerla y no dejarla sola y eso haré aunque me quiera lejos de ella.

La película termina y más de uno en la sala termina en llanto, ella me mira sin entender por qué lloran...

—Es enserio, que patéticos.

Nos ponemos de pie y salimos de la sala, ella aún luce sin entender y cuando ambos salimos fuera del lugar sin previo aviso saltamos a reír...

—-De verdad las personas exageran, es solo una película.

—-Si, ese es el efecto que puede llegar a tener.

Si pensarlo empiezo a caminar junto a ella pasamos por los jardines y caminamos por el césped mientras la noche es iluminada por estrellas.

Me detengo y ella hace lo mismo admirando la luna, me siento en él césped húmedo por la noche y la ayudo para que haga lo mismo...

Me recuesto en el césped luego de que ella lo hace quedando con las vistas fijas en el cielo estrellado.

—Por que me seguiste cuando te invite el helado, por que accediste a acompañarme a ver la película y por qué estás aquí ahora...

—-Son muchas preguntas Rafael, confórmate con saber que eres irritante y molesto solo lo hice para salir de ti.—-Hace una pausa y ambos no quitamos la vista del cielo estrellado estando acostados en el césped.—-Y supongo que... por qué no eres como esos mafiosos que acostumbro a poner tras las rejas o matar, no hay malicia en tu mirada y eso pocas veces lo suelo reconocer.

—-Aveces solo hay que ver con los ojos del alma.—Agregó

—-O quizás solo es cuestión de saber diferenciar entre Los Ángeles y los demonios.

Responde

—-Soy un ángel con buenas intenciones créeme..—Agregó algo coqueto

—Mañana tengo una famosa excursión por el bosque, vienes o te quedas...

Dejo de mirar al cielo y poso mi vista en su perfil mientras mira el cielo, no puedo creer que me esté invitando a..

—-No es una invitación a salir solo que me aburro con ese montón de pendejos.

—-Será un gusto ir Hera.

Perdición [+21] Donde viven las historias. Descúbrelo ahora