15- Lindas sorpresas.

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Sábado. Hoy es el día en que mi hermana anunciará que está embarazada.
La reunión por el cumpleaños de Paul se llevará a cabo en la casa de mi madre, así que nuestros amigos y los compañeros del trabajo irán a dicha celebración.

-Aquí está el desayuno, hecho con mucho amor.

Hunter ingresa a mi habitación sosteniendo una bandeja con dos tazas de café, croissant, mermelada y tostadas.
Viste únicamente pantalones deportivos.

-Oh, pero qué completo resultaste ser. -le halago, acomodándome en la cama. -Ese desayuno tiene buena pinta.

Deja la bandeja con cuidado sobre la cama, y besa mi mejilla.

-Buen día. -le digo sonriendo.

-Buen día. -responde. -Espero que te guste.

-Apuesto a que sí. Gracias.

Se acomoda a mi lado y agarra una de las tazas con café.

-¿Así que en la noche irás a la casa de tu madre? -me pregunta.

Yo tomo un croissant y le doy un mordisco.

-Así es. Voy más que nada por mi hermana. -le cuento.

-¿Está muy emocionada por dar la noticia?

-Sí, y nerviosa. -me río. -Cuando nos lo dijo, realmente la noté feliz... -suspiro. -Ella siempre quiso ser mamá, y finalmente se le dio.

-Eso es hermoso. -opina. -Supongo que esta será una etapa emocionante para ella y para Paul.

-Eso espero.

Él parece notar la inquietud en mi rostro, ya que deja la taza a un lado y me observa.

-Hay algo que te tiene mal. -dice. -¿Quieres hablar sobre ello?

-Estoy bien. -le digo poniendo mi mano sobre la suya. -Es que, aún me cuesta aceptar que seré tía.

-¿Te gusta la idea?

-¡Sí! Es decir, siempre supe que mi hermana en algún momento sería mamá. -comento. -Pero, supongo que nunca se está preparado para la llegada de un bebé a la familia.

-Pero siempre es una bendición, y más cuando es deseado tanto. -aprieta mi mano.

Se acerca y deposita un beso en mis labios.

-Pero sé que hay algo más que te preocupa. -murmura.

-La relación entre mi madre y yo está muy tensa. -suelto finalmente. -Discutimos constantemente.

-¿Me quieres contar el motivo? -acaricia mi mejilla. -¿Lo que te contó Néstor tiene algo que ver? -indaga.

-Él es enfermero, y... me dijo que el verdadero motivo por el que mi madre visita el hospital es por un asunto... grave. -me sincero con él. -Ella es muy reservada y únicamente dice que va por chequeos de rutina.

-¿Y has hablado con ella? ¿Le dijiste sobre tus sospechas? -me pregunta con calma.

-No. Nuestras charlas siempre terminan en discusión y, en el fondo, es como si eso fuera una señal. -pienso. -No sé si quiero conocer la verdad. Me aterra el sólo pensar que ella...

No puedo terminar la frase, y Hunter me abraza dándome consuelo.

-Tarde o temprano lo sabrás. A veces posponer asuntos importantes trae severas consecuencias. -me aconseja.

Me separo de él y suelto un suspiro.

-Sí, lo sé. Debo enfrentarla y lograr que me diga la verdad, pero no es tan fácil. -me quejo.

150 DíasDonde viven las historias. Descúbrelo ahora