Embarazada a los 16 (Editando...)

Capítulo 30: Te Amo.

*Capítulo 30: Te Amo*

 

(SILVIA)

Vale, las maletas ya están hechas, todo está recogido. Karina está en la eterna charla con mi nana en la cocina y tan sólo quedan unos días para dar a luz a Iván. No puedo estar más nerviosa, hace casi un mes que no veo a Nico y no dejo de pensar en cómo será nuestro reencuentro. Lo hecho tanto de menos… creo que no debí irme nunca, o tal vez sí… la verdad es que ahora estoy completamente segura de que lo quiero a mi lado y que me da igual el resto del mundo. Ni siquiera he pensado en Cristian y Greg de otra forma que no sea amistosa.

Y tampoco me puedo olvidar de que mis “papis”, es decir Cris y Fer son mi principal apoyo y los necesito demasiado, por suerte aquí, he podido desahogarme con Karina y contarle todas mis dudas y temores. Es extraño pero siempre aboga por Nico, apoya nuestro romance metiendo las manos al fuego por nosotros si es necesario, cosa que no logro entender del todo si no conoce a Nico pero sé que tiene razón, sea como sea Nico o no, hay algo que nunca lo voy a poder cambiar, estoy enamorada de él y eso es lo que importa.

-¡Silvia!-gritó Karina entrando por la puerta muy agitada. Cerré mi maleta y la miré sorprendida.

-¿Qué ocurre Kar?-le pregunté algo nerviosa algo me decía que nada bueno ocurriría hoy. Y menos mal que llegamos a España mañana porque si no, con el mal presentimiento que tengo cambiaría el vuelo para llegar otro día que no fuese hoy. En fin, tengo que tranquilizarme un poco…

-P-pues estaba hablando con María, tocaron a la puerta, y apareció Viviana c-con una… maleta…-dijo mirándome con el ceño fruncido. Abrí los ojos como platos.

-¿¡Qué!? ¿Cómo que con una maleta?-grité soltando mi maleta de golpe y echándome a correr, no demasiado rápido escaleras abajo. Solté un gritó ahogado cuándo vi a Viviana con una bufanda y una chaqueta larga sobre el sofá del salón, mostrándoselas a María. Sólo espero que su viaje sea a Alaska y no a dónde creo que es…

-¡Oh, Silvi!-dijo Viviana sonriente, corriendo hacia mí y envolviéndome en un abrazo-La verdad es que quería hablar contigo, tenía planeado venir antes para que esto no te lleve por sorpresa pero he tenido unos problemillas…-torció su sonrisa ligeramente-pero ya está todo solucionado, la verdad es que me enteré de que te ibas hoy y saqué un billete para mí también ya que me encantaría tomarme unas vacaciones en Barcelona con los tíos. Hace mucho que no los veo y además me gustaría arreglar la relación con ellos, ya va siendo hora de que todo vuelva a la normalidad.

La miré sin ser capaz de decir una sola palabra. ¿Qué se quería venir a Barcelona? ¿A casa de mis padres? ¿Conmigo y con Karina? ¡Tenía que estar de broma! Karina viene conmigo para alejarse de Viviana y de Mark y resulta que ahora Viviana y seguramente Mark, ya que no creo que lo deje aquí, se vienen a España. Esto no puede estar pasando…

-Pero ¿no tienes que quedarte a trabajar? Es decir, me dijiste que tenías trabajo y…

-¡No que va!-me cortó con una sonrisa radiante-He pedido unas vacaciones largas, llevó tres años trabajando sin coger vacaciones y me dieron la opción de coger los meses de esos tres años y los de este año para poder irme.

-Ah, que bien…-sonreí falsamente y me giré para que no ve viese soltar un bufido imperceptible.

-Pues sí, sólo venía para quedarme hasta que salga nuestro avión. La verdad es que quería hablar con Karina antes de irme pero no sé dónde está, no la doy localizado…-suspiró y comenzó a doblar sus pertenencias para meterlas de nuevo en su maleta.

-¿Qué tienes que hablar conmigo?-dijo Karina entrando al salón y mirando de forma desafiante a su hermana.

-Bueno niñas yo voy a ver si todo está en orden para irnos. Si salís avisadme-mi nana me guiñó un ojo y salió del salón a paso tranquilo.