El Hechicero Enamorado

399 40 9
                                    

Eran eso de las 7 de la noche cuando un hombre de aspecto joven apenas llegaba a su casa luego de un día largo de trabajo como mago especialista en las artes y encantamientos oscuros.

Se adentró en su vivienda, la cual ocultaba con un hechizo camuflajeante y rápidamente subió a su habitación. Caminó por los pasillos hasta llegar a su cuarto rápidamente, como si alguien le estuviera esperando. Entró y todo estaba normal; su cama arreglada, sus libros en las estanterías, su armario y las cortinas, pero lo más importante estaba en su escritorio. 

--Oh, buenas noches a la bella durmiente-- Saludó sonriente a una muy pequeñina hada que tenía encerrada dentro de un frasco de cristal que el mismo había encantado para que no se rompiera de ninguna forma.

Se acercó al escritorio y tomó delicadamente el frasco, acercándolo a su rostro un poco, viendo a una asustada hada temblar del miedo y pegar su espalda al otro extremo del frasco.

--¿Qué pasa pequeña? ¿Me tienes miedo?-- El Mago disfrutaba ver como ella temblaba y temblaba, por lo que sonrió al verla empezar a llorar del miedo. Ella aunque era capaz de hablar, él no le escuchaba por lo pequeñita que era, por lo que solo se comunicaba mediante señas.

Ella transmitía brillo inconscientemente, lo que la hacía alumbrar todo lo que estaba en la mesa  y solo la alimentaba con comida para insectos.

--¿Sabes? He estado enamorado de ti desde que te vi volar cerca de mi arbusto de flores aquella vez, aunque es una lástima que seamos de tamaños tan diferentes. Por eso me dediqué a cuidarte ya que pareces tan frágil que por eso quiero lograr la fórmula perfecta para, o hacerte de mi tamaño y mía, o hacerme pequeño para ti-- Él sonrió con enferma obsesión mientras ella negaba con desesperación y a él le daba ternura el como ella intentaba romper desde dentro el frasco, sin ningún resultado.

--Y hacerte mía finalmente. No sabes cuanto me alegra ser la razón por la que tu corazón lata de amor, odio o miedo hacia mi. No me interesa si me quieres, solo me interesas únicamente tú-- Entonces besó el frasco, cosa que a la hada le dio mucho asco, y luego volvió a dejar el frasco en el escritorio con cuidado y simplemente se dispone a mirar a asustada hada como todo un enamorado.

--Bueno, iré a buscar algo de comida para ti, debes estar muy hambrienta, ¿no es así?-- Entonces se dispuso a salir de la habitación, dejando sola a la hada cautiva.

-Fin.

------
¿Qué les pareció? A mi me pareció bien.

Frases y Cosas de un chico Yandere #3Donde viven las historias. Descúbrelo ahora