Cedrick Liman Saga Herederos Litman 5

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No he podido dejar de mirar la hora desde que deje a Lily en la escuela, mis cuñadas me tuvieron que sacar de la escuela, porque no era solo yo que no quería irme, mis hermanos también y mi princesa y sobrinos, ellos muy bien gracias, entraron a la escuela sin echarnos una segunda mirada.

¿En serio?, ¿tan poco les importamos?

─¿Usted qué opina señor?─ me pregunta.

─¿Sobre qué? ─ preguntó serio exasperado con la hora que no avanza.

─La...la presentación señor ─ me dice el chico preocupado y entonces recuerdo que se supone que estoy en una reunión para un nuevo proyecto que se está desarrollando.

─Lo siento no está prestando atención, hagan la presentación de nuevo ─ indico y los presentes me miran como si hubiera dicho una completa locura. Mi celular suena y lo tomo enseguida.

─¿Sigue cuerdo? ─ me pregunta la señora Ania con burla del otro lado.

─Siga burlándose, siga burlándose ─ digo con sarcasmo.

─Se preocupa demasiado ya se lo he dicho, pero no lo llamo por eso, debo viajar, me acaban de avisar que mi hija está en el hospital ─ me dice.

─¿Ella está bien?, ¿qué le paso? ─ conozco a los sus hijos, ambos y son chicos muy buenos y responsables que adoran a su madre.

─Si, ella está bien, lo que pasa es que ella está embarazada y se cayó, por suerte ambos están bien, pero....

─No diga más, entiendo perfectamente no se preocupe haré los arreglos para que pueda viajar lo más pronto posible ─ le aseguro.

─Cedrick...

─No, nada de eso, haré los arreglos y de verdad espero que tu hija y tu primer nieto estén bien ─ le digo.

─Gracias Cedrick, cualquier cosa te aviso ─ me dice ella para después colgar.

Hago los arreglos para que la señora Ania tome uno de nuestros aviones privados y pueda ir a ver a su hija, es un momento muy delicado y es lo correcto que ella esté junto con ella en estos momentos, además de que hacer eso él hacerlo me ayudo a poder distraerme de pensar en que podría estar haciendo mi princesa, si estará bien, si comió bien.

*********

─¡PAPI! ─ grita mi princesa al verme para después correr hacia mí cuando me ve al salir de clases, yo la recibo con los brazos abiertos sintiendo que él alma me regresa al cuerpo cuando la tengo de nuevo entre mis brazos ─ hoy fue un día muy divertido papi ─ me dice ella con emoción.

─¿Sí? ─

─Sí, hicimos muchos dibujos, y juegos, hay muchos niños con nosotros ─ me cuenta mientras caminamos hasta el auto.

De camino a casa ella me cuenta que tiene una amiga, que se llama Sam, la profesora la sentó junto con ella después del recreo lejos de sus primos, en palabras de mi hija, según la profesora ellos estaban hablando demasiado.

─Pero nosotros solo hablamos lo mismo que en la casa papi, nada más, lo prometo ─ me dice ella levantando la mano en señal de juramento.

─No te preocupes mi amor, te creo ─ le aseguro, si ella me dice que estaban hablando así cómo hablan en casa, claro que estaban hablando mucho, no entiendo cómo es que ellos tres se la pasan hablando todo el día, no entiendo de donde sacan tantos temas de conversación.

Mientras mi princesa me sigue contando de su primer día de clases, llegamos a casa, él primero que nos recibe es Os, o cómo mi hija lo llama.

─Osito ─ dice feliz de ver al enorme perro que si parece un peluche en realidad un peluche gigante ─ papi, ¿dónde está nana?, le quiero contar lo que paso en la escuela ─ me dice.