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Pov Scarlett

Pase el resto de la tarde cómo la paciente de los niños, me sorprendió demasiado lo serio que se tomaban su papel cómo doctores o más bien mini doctores, solo lo dejaron cuando fue su hora de la merienda, cuando eso pasó le logre convencer de que estaba mejor y después los supervise con la tarea.

─¿Está es la izquierda? ─ me pregunta Lily, se está tomando un baño y también repasando lo que le mostraron en la escuela.

─Si ─ contestó.

─¿Y está es la derecha?─ levanta su mano derecha, ella tiene las palmas hacia arriba.

─Si, así es ─ contestó, tomando la toalla para sacarla de la tina, ella gira sus manos poniendo las palmas hacia abajo.

─¿Y ahora cuál es cuál? ─ me pregunta con interés, la sacó de la tina y la envuelvo con la toalla para después tomar sus manos.

─No importa si tus manos están hacia arriba o hacia abajo, esta mano es la derecha y está es la izquierda ─ le explico.

─Es que me confunde ─ dice haciendo un puchero, qué linda.

─A ver, ¿con qué manos dibujas? ─ le preguntó.

─Está ─ levanta su mano derecha.

─Ok, y con esta es la que también escribes en la escuela, ¿verdad?, le preguntó ella asiente ─ bien, pues está es tu mano derecha, todo lo que esté del lado de esta mano es tu derecha, lo que significa que lo que esté de este lado es tu izquierda ─ le explico ─ ¿lo entiendes? ─ le preguntó.

─Creo ─ contesta mirando sus manos ─ ¿podemos dormir todos juntos otra vez? ─ pregunta ella con emoción.

─No ─ contestó enseguida y ella hace un puchero y la llevo al armario para ponerle el piyama.

─No quiero dormir sola ─ me dice.

─Princesa duermes con 15 peluches y con Oz también ─ le recuerdo ─ ¿cuál quieres usar? ─ le preguntó mostrándole un piyama de caballos blancos y otro de caballos negros.

─Los blancos por favor ─ dice ella ─ pero durmiendo contigo y mi papi estaré más segura y las personas malas no vendrán por mí ─ dice ella.

─Ninguna persona mala va a venir, por ti, ni tu papá, ni yo y nadie de la familia, lo va a permitir, no importa si no dormimos en la misma cama ─ le digo le paso la ropa interior y después el piyama para que se lo ponga.

─¿Segura que no vendrá nadie malo por mí mientras duermo? ─ pregunta ella un poco desconfiada.

─Muy segura, creeme estaré muy pendiente de que nadie malo venga ─ le aseguro.

─Y yo también estaré muy pendiente de que eso no pase mi amor ─ le dice su padre desde la puerta de su armario.

─Bueno, pero...¿se quedan conmigo hasta que me duerma? ─ propone ella.

─Por supuesto ─ contestamos ambos al mismo tiempo ─ pero nada de conversación ─ le dice su padre.

─Solo un poquito papi ─ dice ella.

─Ok, ven te haré unas trenzas para que pueda dormir mejor ─ le dice tomándola en brazos, él la lleva hasta su tocador y toma uno de los cepillos para empezar a peinarla.

─Papi, ¿Puedo ir a un salón de té? ─ le pregunta ella de repente, mientras la peina.

─¿Para qué? ─ pregunta él confundido y yo lo miro cómo si fuera idiota, ¿cómo que para qué?.

Cedrick Liman Saga Herederos Litman 5Donde viven las historias. Descúbrelo ahora