Sophia
No estaba orgullosa de la persona en la que me había convertido los días posteriores a mi encuentro con Ethan. No había tomado decisiones inteligentes.
Quería hablar con Anna, pero no podía serle honesta. No en este momento, al menos. Estaba a punto de casarse, no podía arruinarle su felicidad con mis problemas, así que en lugar del consejo de mi mejor amiga, me enfoqué en la bebida y en tomar decisiones estúpidas y precipitadas, como aceptar salir con Ben, por ejemplo, luego de la cena de ensayo.
Ben y yo estábamos en la barra de un bar tomando la quinta ¿o era la sexta? copa de mojito. Había sido una semana larga. Me despertaba cada mañana con pensamientos de Ethan dando vueltas en mi cabeza y me iba a la cama cada noche con lágrimas en los ojos.
Unas horas antes, había sido la cena de ensayo.
—¿Puedes creer que voy me casaré con Nicholas mañana por la noche?
Sonriendo, asentí. —A decir verdad, lo esperaba. Cuando vi cómo Nicholas te miraba, supe que estaba enamorado de ti. Se le notaba a toda la cara y a ti también, aunque querías negarlo.
—Soy la mujer más afortunada del mundo — respondió.
El dolor en mi pecho era algo a lo que me estaba acostumbrando. Ver a otras parejas enamoradas y felices me dolía porque yo quería eso. Pero no con cualquiera y eso dolía aún más. ¿Mi corazón dejaría de querer a Ethan alguna vez? ¿Cuántos golpes más resistía antes de dejar de amarlo? Esa noche había recibido varios. El primero, cuando lo vio llegar de la mano de Isabelle y aun así no pudo dejar de latir como un loco. El segundo, cuando la tomó de la cintura para ayudarla a sentarse. El tercero, cuando la tomó de la mano y bailaron juntos el vals. El Cuarto, cuando nuestros ojos se encontraron. El quinto, cuando nuestros dedos se rozaron durante el brindis. El sexto, cuando se disculpó con Anna y se retiró en silencio porque Isabelle no se sentía bien.
—¿Estás bien? Pareces deprimida —La preocupación en la voz de Ben era evidente.
—Estoy cansada. Lo siento. Trataré de no verme deprimente —bromeé.
—¿Qué te parece si dejamos que los tórtolos disfruten de su última noche como novios y nuestros nos vamos a tomar algo a un bar?
Lo poco que me quedaba de sentido común me decía que rechace su oferta, sin embargo, no estaba ese humor para seguir a mi sentido común en ese momento. Así que acepté y ahora estábamos aquí, bebiendo como si no habría mañana.
—Si fueses un animal, ¿cuál serías?— tartamudeó Ben, arrastrando las palabras.
Lo miré intentando enfocar la mirada. —No lo sé. Me gustan los delfines.
—Yo sería un burro, ¿sabes por qué? —dijo, guiñándome un ojo o al menos lo intentó.
—No, no quiero saberlo.
—Puedo mostrártelo.
Lo miré con reproche.
—Sí, ya sé, ya sé. Solo amigos —contestó con un hipo de por medio. —Ahí te va un juego. ¿Con quién te casas, a quién besas y a quién matas?
Fácil. La respuesta sería Ethan para las tres.
—¿Frankenstein, Drácula o Shrek?
Arqueé la ceja. —¿Qué tiene que ver Shrek con Frankenstein o Drácula?
Se encogió de hombros. —No sé, no se me ocurrió otro.
—Es como que te dijera, elije entre "La sirenita" o la "La llorona".
![](https://img.wattpad.com/cover/153297463-288-k121357.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Regresa Conmigo
Roman d'amourÉl rompió su corazón. Sophia no podía dejar de amarlo, pero sabía que nunca podría perdonarlo. Ahora estaba intentando olvidarlo y aprendiendo a vivir de nuevo. Continuando con su vida...hasta que ella descubre la verdad y pone a girar su mundo un...