Satsuki

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Capítulo 40: El primer Arranque

Antes del pitido del árbitro, Kenshi tomó el balón con fuerza y procedió a ubicarse de fondo de la cancha, intentó mantener la concentración mientras iba mirando ala banca del Kaminawa donde se encontraban Hiro y las demás. Procedió a darle unos botes para poder despejarse. Andaba un poco hiperactiva desde la mañana e incluso antes luego de haber terminado su juego de Nintendo DS cerca de la madrugada. Cuando llegó al final de la cancha, esperó al silbido del árbitro—Ando con un poco de sueño—pensó Kenshi mientras miraba el balón con curiosidad—Debí dormirme y dejar pausado el juego. Así no me quejaría. Pero quería asegurarme un reto mayor y creo que lo mismo será con este partido.

Cuando el sonido del silbato sonó, ella pegó un grito que exhaló emoción casi desde sus pulmones, lanzó el balón con fuerza y procedió a darle un fuerte manotazo haciendo que el balón cruzase la red con fuerza.—¡Mierda!—gritó Saichi intentando frenar el lanzamiento poniéndose en posición. Sin embargo, el lanzamiento fue demasiado rápido que le dio poco tiempo para responder. El balón cruzó la defensa de Saichi haciendo que cayese al fondo de la cancha. El Kaminawa había obtenido su primer punto.

—¿Como paso todo tan rapido?—preguntó Aoi desde la banca con una vista perpleja.
—No tengo idea—dijo Ishida sorprendido—Fue todo tan rapido. No creo que tampoco las chicas del Kaminawa lo entiendan

—¿Qué carajo paso?—preguntó Toriko confundida.
—Ni idea—respondió Murama pensativa—Ese tiro era sencillo y no pudimos frenar a Kenshi, pero supongo que es por el estrés del partido. Solo es un primer punto.
—Bien, entonces debemos pensar en un plan para evitar el siguiente—dijo Sakurawa mirando a Murama guiñándole el ojo.

Matsuo desde la banca comenzó a pensar en un plan se notaba en su postura, medio inclinada, sentía que habían partido mal y necesitaba pensar en algo rápido. En eso sintió una mano en su hombro que le pedía que se calmase. Al darse la vuelta observó que era Ishida.—Tranquilo—dijo Matsuo en un tono seco—No quiero ponerme tan tenso como paso en Hitsuka...Es solo que necesito pensar en algo.

—Nagata, Sakurawa—exclamó Murama mientras se encontraba sentada en el suelo de la cancha—¿Puedo pedirles algo?
—Claro—respondió Sakurawa con un tono alegre.
—¿Podrían bloquear con mayor precisión?—preguntó Murama mientras se levantaba y se revisaba los zapatos—El disparó de Yamaguchi fue demasiado potente, así que si bloqueamos con dos personas lo suficientemente altas como son Sakurawa y tú sería sencillo detener ese balón. Ya que Soikawa está en banca.
—¿Eh?—dijo Nagata estupefacta—Sakurawa mide 1.74 pero yo mido solo 2 centímetros menos, se siente muy asimétrico.
—En teoría no es asimétrico—dijo Sakurawa—Nuestra diferencia es mínima. Además, entre las seis eres la segunda más alta. No pongas excusas Satsuki—agregó riendo mientras le daba una palmada fuerte en el trasero a Satsuki,
—¡Ay me dolió Sakurawa tienes la mano pesada!—gimió de dolor.
—Perdón jeje—se excusó Sakurawa—Me pasé un poco ¿Entonces vas ayudarme a bloquear?
—Haré lo mejor que pueda—mencionó Nagata alegre mientras veía que no le doliese la palmada.

El balón fue tomado por Toriko quien lanzó el balón con fuerza usando su mano dominante, la diestra, esperando que el tiro fuese lo suficiente potente para poder empatar.—Trataré de dar vuelta el marcador—pensó mientras saltaba y levantaba su mano dominante para rematar—¡Obsérvame Murama! El balón golpeó con una fuerza potente y cruzó la red en dirección a Suska casi sin detenerse.
—¡Ópa!—exclamó una voz que dejó a Toriko acomplejada. Al observar vio como Okuma había frenado el balón usando su torso provocándole un nuevo impulso al balón.
—¿Frenó el balón con sus...—dijo Ishida extrañando antes de ser silenciado por Aoi.
Matsuo tuvo un breve recuerdo a lo cual le gritó a Toriko que se moviese hacia la red con suma rapidez. Okuma dio una leve sonrisa mientras observaba con júbilo como el balón se elevaba, retrocedió un poco para que Henka lo posicionase sobre su cabeza y Kenshi le diese nuevamente un remate.
—No de nuevo—pensó Toriko intentando hacer presión en el bloqueo—A este paso fácilmente nos la van a volver a meter.