Capítulo 17

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Eiden

El dolor de cabeza que traigo es imposible evitarlo, todos los días me he quedado hasta tarde en Índigo, las reuniones largas y grandes pilas de documentos por revisar. Llevar el manejo de una empresa como esta no es trabajo fácil, pero no me sorprendo, para esto fui criado y preparado.

Alex y Dylan tampoco han salido de mi oficina, entre Alex y yo hemos repasado todos los contratos y archivos para futuros planes de negocios, mientras que Dylan solo se la pasa tomándose un bubble tea sentado. Que afortunado, su trabajo es sólo cuidarme y acompañarme a donde sea, y cuando tu jefe solo está en su oficina no hay mucho por hacer.

-¿Podemos parar hasta aquí por hoy?- Me pregunta Alex estirando su espalda.

- No es mala idea, esto me matará si continuo leyendo un documento más.

-¿Oigan?- Alex nos ve a ambos- ¿Y si vamos a Carper's Club?

-¿Me lo preguntas como guardaespaldas de Eiden o cómo amigo? – Pregunta Dylan.

-Cómo amigo Dylan-Responde Alex mientras pone los ojos en blanco.

-Entonces no- Responde mientras le da otro sorbo a su bebida.

-Entonces iras como mi guardaespaldas- Le digo a Dylan con una sonrisa malévola.

-Aja sí- Da un último suspiro- Está bien, iré, pero como amigo.

Al llegar a Carper's Club fuimos directo a la zona VIP como siempre, pedimos bebidas y estuvimos por el balcón viendo la pista de baile. Poco después Alex le puso atención a una chica pelirroja quien estaba en la misma zona que nosotros, por aquí él le guiñó el ojo y ella ya estaba platicando con él de una forma muy coqueta.

Otras chica quiso acercarse a mí pero no le puse atención por lo cual no tardó en irse, después otra, otra y otra, hasta que ya no habían más chicas en la zona VIP por esquivar.

-Parece milagro que no quieras estar rodeado de mujeres – Me dice Dylan.

- No lo sé Dylan, me siento raro. No he podido estar con una mujer últimamente, siempre que trato se me viene a la mente- Fui interrumpido.

- Audrey – Responde él.

No respondo.

-Por más que intentes engañarte, es imposible, ella siempre está en tu mente y cuando te des cuenta querrás estar siempre con ella. Te faltará oxígeno cada vez que se despidan, tu respiración se acelerará cada vez que la veas y te recostarás en tu cama cada noche deseando tenerla a tu lado durmiendo.

-Lo dices como si se tratara de ti.- Le digo a Dylan, él tenía la mirada perdida de forma pensativa. Hasta que sus ojos se fijaron en un punto exacto entre la multitud.

-Espera. . . ¿No es Lia la de ahí? Y está con Audrey.

Le resté importancia al tema de conversación en la que estábamos y rápidamente la busco con la mirada en la pista de baile. Es ella. Se veía deslumbrante en ese vestido azul, pero más la deslumbraba su baile, así era ella.

De pronto un tipo abrió empezó a molestar a mi hermana agarrándola por la cintura, ella y Audrey le daban pelea pero él no se rendía. Me enfurecí, iba a bajar corriendo pero me percaté que Dylan ya no estaba a mi lado en la zona VIP. Todo fue tan rápido, él apartó al tipo de Lia y después ella corrió a sus brazos. Se veían a los ojos con cierto alivio pero con una chispa especial que me es difícil de decir.

Dylan disponía en sacarlas de la pista pero noté que el tipo dijo algo a lo que Audrey se volteó y empezó a discutir con él. No dudo ni un segundo en bajar hasta la pista, mis pasos fueron veloces, no la podía dejar sola.

Alba: Una Luz de Amor (Libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora