Capítulo 3

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Audrey

De camino a casa revisé mi celular, tenía un mensaje de Ian:

< Mamá ya fue enterrada, ojalá hubieras venido >

En mi interior sé que no sentía culpa alguna por no ir al entierro de ella, no quería seguir cerca de ella, estarlo solo me pondría más tensa. No la he perdonado por lo que me hizo.

Respondí:

< A ella no le hubiera encantado >

Guardé el celular en mi bolso, aproveché para ver las pocas estrellas que se alcanzaban a ver desde la ventana del copiloto, o más bien desde la gran ciudad que nunca duerme, Nueva York.

Se nota la tensión en el aire. Gael no me había hablado desde nuestra conversación con los Windsor, el miedo comenzaba a subir por todo mi cuerpo porque sé que llegando a casa...nada bueno ocurrirá.

En cuanto el coche llegó enfrente de nuestra casa Gael se bajó rápidamente y me abrió la puerta para jalarme bruscamente del brazo hasta el interior de nuestro hogar.

- ¡Gael suéltame! ¡Me estas lastimando!

Fue tanta la fuerza que me impulsó hacia el sofá, y en cuanto me levanté a verlo sentí como su mano me daba en el cachete. Lo que hizo que volviera a caer sobre el sofá.

Me levantó con una mano en cada brazo para tenerme de frente y me gritó:

- ¡Te dije que no trabajarías! ¡Me desobedeciste! ¡Solo el hombre de la casa debe trabajar!

- ¡Yo no le pedí trabajo a Lia, ella me lo ofreció! - Respondí con lágrimas cayendo sobre mis mejillas - ¡Me lastimas!

- ¡Más me lastima tu desobediencia! Y lo peor de todo, ¡Que me dejaste en vergüenza enfrente de mi jefe!

Sentí otra bofetada tan dura que terminé en el suelo. Mis cachetes estaban rojos y se sentían irritados, no se atreverían a ponerse morados o a sangrar ya que están acostumbrados.

- ¡Basta! No iré a la entrevista pero porfavor.... ¡Deja de pegarme! - dije cubriéndome la cara viendo el piso, aún seguía tirada.

- ¡¿Para qué?! Si fue orden de mi jefe. Irás, pero no quiero que cometas ningún solo error. Ya después veo como sacar un pretexto para que renuncies.

Veo que Gael fue rumbo al pequeño armario que está en el pasillo y abrió la puerta.

No. No otra vez.

Me empecé a levantar para correr a encerrarme al cuarto pero él logró por detrás rodear mi cintura con sus brazos.

- ¡No Gael! ¡Porfavor! - Grité tratando de soltarme de él - ¡Al armario no porfavor! ¡Me da mucho miedo estar ahí encerrada!

- ¡Si no puedo evitar que trabajes entonces me las cobrare de otra manera!

Me tiró adentro del armario y cerró la puerta con llave. Empecé a golpear la puerta con todas mis fuerzas pero era inútil.

- ¡Sácame de aquí Gaeeeeel! - Gritaba con todas mis fuerzas.

Sentía como mi respiración aumentaba de velocidad hasta que me empecé a quedar sin aire. La ansiedad me inundaba y lloraba con angustia. Sufro de claustrofobia, para tratar de tranquilizarme me fui hasta la esquina y abracé mis piernas repitiéndome:

- Ya pasará....ya pasará....ya pasará -

Las lágrimas no dejan de caer, jamás lo han dejado de hacer.

* * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * * *

~ - ¡Mamá! - Gritaba llorando de dolor - Por favor....¡Te lo suplico! Ayúdame -

Ella se paró enfrente de mi, sus ojos ardiendo de ira penetraban mi visión.

- Tú te lo buscaste - Respondió. ~

****

- ¡No! - Di un brinco despertándome.

Mi respiración estaba rápida pero logré tranquilizarla lo más que pude. Mierda. Otra vez esa misma pesadilla.

Se escuchó la puerta del armario abrir.

Por aquí Gael abrió la puerta salí lo más rápido que pude de ahí, todo mi cuerpo temblaba.

- Vístete, no debes llegar tarde a tu entrevista - Me dijo él mientras iba a la cocina por un café.

Me apresuré y fui a nuestro cuarto para verme en el espejo. Las marcas en la cara se pueden cubrir con maquillaje, pero algo más me preocupa....mis brazos. Están marcados por el agarre de Gael, con moretones que ni el maquillaje podría cubrir. Tendré que llevar algo con mangas.

Del closet de la habitación saqué una blusa fucsia de media manga que alcanzaba cubrirme hasta los codos, me puse una falda larga blanca y unos tacones del mismo tono que la blusa y bolso. También unas pulseras doradas, no podía arriesgarme a que me vieran las muñecas tal y como lo hizo Livette.

Me detuve a verme en el espejo, veía detenidamente todos los detalles para que no se notara ninguna marca del incidente de anoche.

En mi reflejo se veía como una lagrima caía sobre mi mejilla derecha, ¿Por qué a mi?, yo solo me casé con un hombre quien creía ser el amor de mi vida, pero resultó ser una maldición en ella.

En cuanto entré a la cocina vi que Gael ya se iba al trabajo, yo tenía que llegar un poco más tarde. Se detuvo después de abrir la puerta, volteó a verme y dijo:

- Lo hago por tu bien cariño, Te amo.

*****

En el siguiente capítulo veremos qué ocurre en la entrevista entre Audrey y Eiden...👀

Audrey tuvo una pesadilla de algún recuerdo de su pasado, ¿Qué habrá ocurrido?

Si Gael es así de agresivo por un detalle pequeño, ¿Qué será cuando le de un ataque de celos?😨😨😨

En este capítulo conocimos una debilidad de nuestra protagonista, su claustrofobia.😫

Estaré actualizando muy pronto! Estén al pendientes, TQM💖

Alba: Una Luz de Amor (Libro #1)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora