Pasaron dos semanas y finalmente llegó el día del evento, no podía decir que no estaba emocionado y curioso por lo que me encontraría. Era interesante poder conocer más sobre la cultura de los vampiros, todavía quería investigar sobre la historia de los vampiros, pero con todos los acontecimientos que sucedieron en mi vida últimamente, no podía pensar en eso.
Al principio fue difícil salir de la casa de Kaiser, tenía miedo de ser atacado, pero no volvió a suceder algo como eso. Las muertes del vampiro salvaje se detuvieron misteriosamente, y no podía evitar pensar que todo estaba relacionado, pero no quería ponerme paranoico.
En este momento me encontraba descansando un poco del trabajo mientras hablaba con Hiori, era una buena compañía y su personalidad tan calmada me ayudaba a tranquilizarme.
—¿Pudiste encontrar un lugar donde quedarte? —me pregunto con cautela.
—Todavía no encontré un lugar fijo. Siempre que intento buscar un lugar Kaiser dice que puedo quedarme con él —murmuré cansado.
Hiori soltó una suave risa mientras tapaba su boca con su mano.
—Ya encontrarás la oportunidad, pero ese chico parece muy cómodo contigo por lo que me cuentas.
Sabía que Kaiser no quería que me vaya, pero eventualmente debería hacerlo. Es lo correcto.
—Me cumple demasiados caprichos, no quiero que se me haga costumbre —mencioné mientras suspiraba.
A pesar de eso, estaba muy agradecido con todo lo que Kaiser hizo por mí, estaba siempre atento a cómo me encontraba. Gracias a él logré recuperarme un poco de la situación con mi casa.
Unas horas después mi turno en el trabajo terminó, así que comencé a guardar mis cosas dispuesto a encontrarme con Kaiser. Logre cambiar mis horarios para que mis clases no choquen con la fecha del torneo en la ciudad de vampiros. Resulta que la ciudad tenía un nombre, y era Byalia, un lindo nombre debo decir.
—Nos vemos Hiori —me despedí.
Hiori saludo con su mano y abrí la puerta, dirigiéndome al exterior. La noche era un poco fría, pero agradable para mi gusto. El aire fresco siempre es bueno.
—Yoichi ¿Estás listo? —se escuchó desde arriba.
Al enfocar mi mirada en el lugar donde provenía la voz, vi a Kaiser parado en un poste de luz. Rodé los ojos con diversión al notar que solo quería llamar la atención.
—Si, lo estoy —respondí con una sonrisa.
El tomó mi mano y me cargó en sus brazos, a este punto me acostumbre un poco a la sensación de estar varios metros sobre la tierra, pero no dejaba de ser algo emocionante.
El viaje se me hizo eterno, no podía esperar para ver cómo se desarrolla todo. Cuando Kaiser aterrizó, había más ruido de lo normal como era de esperar, y todos se veían muy emocionados. Parecía ser algo muy esperado por los vampiros. Caminamos hasta el centro de la ciudad, allí había un pequeño puesto con una fila que asumo son los voluntarios. Al parecer solo tenias que dar tu nombre y apellido, y las reglas se explicaran justo antes de comenzar.
Cuando llegó nuestro turno, Anri nos atendió con una cálida sonrisa.
—Kaiser, me alegra que por fin partícipes —hablo Anri mientras tomaba la lista de candidatos.
Luego de anotar el nombre de Kaiser, se giró para verme.
—Yoichi, un placer verte nuevamente, ¿Vas a quedarte para ver las peleas? —pregunto
Asentí con mi cabeza en respuesta. Nos despedimos ya que había más personas que querían anotarse. Caminamos hasta un estadio un poco alejado de la plaza, ya se encontraba algo lleno.
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Llamado De La Noche
FanfictionYoichi, un universitario hastiado, se sumerge en un intrigante cosmos vampírico al descubrir el secreto oculto de Kaiser, su molesto compañero de clase. Entre el magnetismo de pasiones prohibidas y los enredos políticos en la sociedad vampírica, Yoi...