29: Lo peor que podía pasar

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Álvaro:

Recibí esa llamada, que tanto temía responder, tenía miedo, mucho miedo, ni me atrevía a coger la llamada.

"-Álvaro: dime mama.

-Yolanda: cariño... - su voz lo decía todo.

-Álvaro: ¿se acabó no?

-Yolanda: si...

-Álvaro: lo siento mucho, mamá...

-Yolanda: ¿puedes venir?

-Álvaro: si ahora enseguida voy, dejo a María con Eva, y voy...

-Yolanda: gracias cariño, te quiero mucho. - se notaba, que su voz estaba quebrada por las lágrimas.

-Álvaro: y yo mamá, muchísimo, no estás sola."

Colgué la llamada, miré a Eva...

-Eva: ven, anda...

Me abrazó muy fuerte, lo necesitaba, estaba aún completamente en shock, no era capaz de llorarle aún...

-Eva: mucho ánimo bebe, lo siento mucho.

-Álvaro: gracias...voy a por mi madre, ¿vale?, ¿te quedas con María? - me levanté del sofá

-Eva: no te preocupes, yo me quedo con ella.

-Álvaro: gracias bebe, eres increíble.

Me agarró la mano, y la besó.

Llamo a la puerta de la vecina, y recogí a la pequeña de la casa.

-Álvaro: hola María, te vas a quedar con Eva, un momento con Eva, ¿vale? - dije ya volviendo para nuestra casa.

-María: ¿chiii?, ¿donde vaz tu?

-Álvaro: a recoger a la mami, ahora vendré.

-Maria: ¿es mucho rato?

-Álvaro: noo mi amor, no tardo nada, con Eva vas a estar bien.

-Maria: vaeeee.

La dejé en casa con Eva, y Eva lo último que hizo, fue darme un pequeño beso en los labios.

-Eva: ánimo - susurro, para que mi hermana no lo escuchase.

-Álvaro: gracias - acaricié su mejilla.

Bajé al garaje, y arranque el coche, todavía no me creía todo esto, no sabia como asimilar todo lo que me estaba pasando, estaba en shock.

Me puse a conducir, con música baja, y que el aire acariciase mi cara, y mi pelo, intentando dejar todo lo que tenía en la cabeza, ahora mismo.

15 minutos después, llegué a aquel temido hospital, busqué a mi madre, y lo primero que hice, es darle un abrazo, ella se aferró a mi, y se rompió a llorar, que duro es ver a una madre así de rota, es complicado, que lo que es el hombre de tu vida, se vaya así de la nada.

-Álvaro: tranquila mama, sssh - traté de calmarla, acariciándole el pelo - voy a estar a tu lado, no estás sola.

-Yolanda: no me sueltes Álvaro, no quiero estar sola.

-Álvaro: no lo estás mama, te voy a cuidar mucho, todo lo que mereces, eres mi reina.

-Yolanda: que bonito eres cariño, de verdad - parece que se calmaba un poco.

Yo quiero todo contigo (Dani Fernández y Álvaro Mel) Donde viven las historias. Descúbrelo ahora