Jungkook
Jungkook sujetó a Miura bajo sus garras, atrapando su cuello entre sus dientes. Estaba a un movimiento de romperlo. Ella gimió como una cría reprendida y algunos instintos olvidados en él lo hicieron retroceder del borde de esa violencia rabiosa. En el segundo en que la soltó, Miura chasqueó las mandíbulas a centímetros de su hocico, pero no se levantó y cuando él retrocedió, sus escamas en su cabeza y cuello descendieron, indicando una amarga derrota.
Brevemente se dio cuenta que su sumisión fue demasiado sencilla, pero sus pensamientos iban de ella y de vuelta al mar, buscando un mechón de cabello blanco entre las olas. Resoplando, capturó la más mínima esencia de bosque. Pero eso era imposible. Todo aquí olía a sal y podredumbre. Un pequeño destello de un recuerdo le hizo recordar al elfo, pero no podía ser Jimin. No en este lugar. El elfo estaba muerto.
Miura se movió, tratando de rodar y cubrir su vulnerable barriga. Él echó la cabeza hacia atrás y comenzó a formar un gruñido sobre sus fauces, advirtiéndole que se quedara abajo. Ella abrió su hocico, jadeando. Jungkook levantó una enorme pata y extendió sus garras sobre su pecho, manteniéndola quieta, sintiendo una emoción desconocida al controlar a uno de los suyos. Raramente había tenido la fuerza para derrotar a cualquiera de los amatista, pero las cosas eran diferentes ahora.
Miura desvió la mirada como otro signo de sumisión y las fauces de Jungkook dejaron de gruñir, percibiendo la esencia de ella a través de sus dientes y sobre su lengua.
Le había pedido un lugar para cambiar justo después del apareamiento, antes de que se arrancara su propia piel y ella lo había traído aquí abajo, entre las olas. Lo último que esperaba encontrar era a un elfo. O tal vez había sido una ilusión dada la locura que todavía arañaba sus pensamientos.
Levantó su cabeza para admirar a las armadas que volaban en remolinos por encima de ellos.
Miura golpeó su cabeza contra su cuello y ronroneó. Era asqueroso, esto era todo lo que podía hacer para evitar no cubrir su hocico con una pata y apartarla. Pero al menos la tenía bajo su merced. Y pronto, si jugaba bien sus cartas, también tendría a Donghae. Había sacrificado tanto. Demasiado de su mente, gran parte de su alma y la mayor parte de su cuerpo entonces, ¿qué más le quedaba? Su vida consistía en sobrevivir. Siempre lo había sido. Y ahora también sabía cómo sobrevivir a estas bestias.
Dejó que el fuego se agitara en su garganta, probando el ácido y prendiéndolo en llamas. Extendiendo su única ala buena y manteniendo la otra ala rota contraída, dejó que el fuego creciera, hasta que burbujeó y lo escupió, y luego rugió, extendiendo la llama a través de las rocas y convirtiendo el agua en vapor. La luz inundó la playa y llegó todavía más lejos, direccionando el lugar que Jungkook deseaba ver.
Si hubiera sido Jimin, entonces probablemente el terco elfo finalmente habría aprendido a huir de la muerte en lugar de correr hacia ella.
Se giró y regresó a la cueva, cada paso era más firme, dejó atrás su corazón junto con las olas y con los últimos restos de esperanza de que algún día podría ser libre.
Gracias por leer 💜
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Elfo Y Dragón #1 Kookmin
RastgelePark Jimin es un elfo criado y entrenado por la Orden para matar a la reina dragón y a todos los dragones que su espada pueda alcanzar, pero entonces se encuentra con el príncipe Jungkook Amatista un dragón diferente a los de su especie que lo hará...