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         —Lo que faltaba—se quejó Rocket sacando su arma retraible del cinturón. Beatriz se puso de pie acercándose.





—No, no—el círculo chispeante crecía cada vez más, siendo uno de decenas que cubrían incluso el cielo—son portales.






Personas comenzaban a salir de cada uno de ellos e incluso naves surcaron el cielo entrando de donde sea que estuviesen. Entendía que era el apoyo pero esa magia sólo la había visto una vez anteriormente y el hombre que la practicaba desapareció en Titán...fue cuando avanzó buscando entre los variados grupos con respiración agitada no por cansancio si no de nervios, emoción, esperanza. Eran demasiados para distinguir entre cada uno.






—¿Nena?






Parecía que su cuerpo había dejado de responder al escuchar ese apodo que no oía en años, esa voz que sólo le llamaba en sus sueños. Se dio la vuelta lentamente sin estar segura de que no fuese una alucinación o un truco sucio de Thanos.






Una lágrima resbaló por su mejilla al encontrarse con los ojos claros de Peter Quill quien se acercaba lentamente al ver que ella no podía. Beatriz estiró la mano hasta tocar su mejilla provocándole una sonrisa cálida y que la suya se posicionara encima, uniéndoles. Fue hasta entonces que cayó en cuenta de que en verdad había vuelto. Soltó una pequeña risa nerviosa sin molestarse en detener el llanto de felicidad que aparecía.





El encuentro era igual de emotivo para Peter quien pese a no sentir el paso del tiempo, la explicación del Doctor Strange antes de llegar le dio más que suficiente motivo para buscarla desesperadamente en cuanto el portal se abrió. Ni siquiera sabía si seguía viva y Stephen no ayudaba en su preocupación.





Traía puesta la chaqueta que usó la primera vez que salvó la galaxia, su cabello oscuro era el doble de largo y el fleco que tanto le costaba domar al despertar se había perdido. Tenía manchas de sangre aquí y allá.





—Te ves preciosa.





—Me cayó un edificio encima.






—Y ni eso evitó que te vieras perfecta.






Poniéndose de puntillas unió sus labios en un beso que ambos anhelaban, terminando de sellar su encuentro. El par de ejércitos no existían, las ruinas tampoco y mucho menos la amenaza Thanos estando en los brazos del otro.






Rhodey estaba a punto de decirles algo cuando Rocket le apuntó con su arma deteniéndolo de cualquiera que fuera su intención para con la pareja.






—Déjalos tener su momento—le amenazó.






Se separaron unos segundos después más seguían sosteniéndose. Mirándose a los ojos.






—¿Eso es un si?—dijo mirando el anillo que colgaba de su pecho. Beatriz sonrió pero su expresión en conjunto con el bullicio lo decía todo—si, mal momento.






Le soltó dándose ambos la vuelta para prestarle atención al Capitán America. Star-Lord tomó en manos sus blasters dirigiéndose una vez más a su novia.





—¿Tú y yo?—preguntó cómo siempre lo hacía antes de pelear.






—Tú y yo—le respondió siguiendo la rutina que tanto extrañaba.






star-girl    ✩   peter quillDonde viven las historias. Descúbrelo ahora