star-girl ✩ peter quill

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Las pantallas holográficas en la sala principal de los Vengadores exponían imágenes de su siguiente objetivo: las Gemas. Beatriz se encontraba sentada al otro lado de la mesa donde Steve comenzaba a explicar las cosas, teniendo a Rocket en la silla junto a la suya. Se sentía en una de las tantas exposiciones que tuvo que hacer en la universidad.

—El cómo lo haremos funciona. Ahora hay que decidir cuándo y el dónde—decía en voz lo suficientemente alta—casi todos aquí se ha encontrado con al menos una de las seis Gemas.

—O cambien la palabra encontraron por "casi se mueren" por culpa de una Gema—añadía Tony uniéndose a exponer.

—Pues yo no sé de qué cosa están hablando—el par de Guardianes miraron al sujeto que poco después supieron se llamaba Scott.

—Como sea—levantaron un poco la cabeza ahora hacia Bruce Banner—tenemos suficientes partículas Pym para un viaje redondo cada uno. Y las Gemas han estado en muchos lugares a lo largo de la historia.

—Nuestra historia—Tony caminaba por la sala hablando—así qué hay pocos puntos específicos para encontrarlas.

—Entonces hay que planear bien nuestros destinos.

Ante las palabras de Clint, Rocket miró a su mejor amiga de manera desafiante. Exactamente como en la escuela cuando su crush hablaba y sus compañeros buscaban molestarla. Se limitó a entrecerrar los ojos y sonreírle sarcásticamente sólo para ser distraída de nuevo por Steve Rogers.

—Muy bien, primero el Aether. Thor, cuéntanos.

Las miradas fueron al Dios del Trueno que más bien lucía como un tío promedio en reuniones familiares de Beatriz luego de vaciar la hielera de las cervezas. Más no hacía nada. Se había quedado dormido con los lentes oscuros puestos. Le tomó un momento para tomar su turno hablando frente a las imágenes, mismo en el que Clint aprovechó para tomar asiento en la otra silla vacía. En el otro lado de Beatriz.

—¿Por dónde empiezo? Ah, el Aether—aclaró su garganta—de hecho no es una Gema. Antes la llamó así. Más bien es como una cosa viscosa enojada, alguien tiene que corregir eso. Pero hay una historia muy interesante. Hace muchos años mi abuelo tuvo que esconder la Gema de elfos oscuros ¡Uuuu!

Soltó una risita, Rocket se cubrió los ojos avergonzado y la castaña unió las cejas sin gracia alguna. Todos parecían sentir pena por él y su explicación excepto el mismo Thor.

—Así que Jane, que de hecho aquí está—con el toque de su sucia mano hizo que la fotografía se la mencionada apareciera—fue un gran amor que tuve...ella metió la mano dentro de una roca una vez y entonces el Aether se introdujo en ella y se puso muy enferma así que tuve que llevarla a Asgard que es de dónde vengo y ahí tratamos de curarla. Yo salía con ella en ese tiempo y la llevé a que conociera a mi madre—hizo una pausa para tomar aire—que murió y...—estaba a nada de llorar—de hecho Jane y yo ya ni siquiera estamos juntos y a veces pasan estas cosas ¿no? Star-Girl tú me entiendes. Y lo único...

Tony decidió ser el que volviera a sentarlo por la actitud sentimental que estaba tomando mientras los demás observaban incómodos.

—Lo único permanente en la vida es la impermanencia—terminó triunfante.

—Súper—Stark le aplaudió—¿quieres comer algo?

—No. Quisiera un Bloody Mary.

—Excelente, tomémonos un descanso en lo que llega la comida.

Y tal como Tony lo comentó, no fue más de una hora después que ya se encontraban repartiéndose los contenedores de comida china recién llegados. Decidieron permanecer en la sala donde estaban. El ver a tantas personas comiendo en la misma mesa hacía a Beatriz casi sentirse en familia. No recordaba la última vez en que eran más de tres.

—Quill dijo que robó la del poder de Morag—comenzó Rocket a los pocos minutos caminando encima de la mesa, abriéndose paso por las cajas de comida.

—¿Es una persona?—la pregunta de Scott hizo que se dirigiera hacia él.

—No. Morag es un planeta. Quill era el novio de Betty.

—¿Un planeta? ¿En el espacio exterior?—insistía mientras llevaba más comida a su boca con ayuda de los palillos chinos.

—¡Cosita! Es igual que un perrito, feliz y emocionado—el peludo acarició su cabello—¿quieres ir al espacio? ¿quieres ir al espacio perrito? Yo te llevo al espacio.

—Entonces Morag...—Natasha pidió regresar al tema principal.

—Ah, si. Creo que ella se sabe los detalles—señaló a Beatriz antes de volver a su silla y abrir la cajita que le tocaba.

Todos le miraron con suma atención esperando a que hablara. La castaña tardó un momento en reaccionar.

—Bueno, el planeta ha estado completamente desolado desde hace unos cientos de años. Le fue fácil sacarla si ignoramos a los matones de Ronan—Tony ladeó la cabeza confundido—un conocido de Thanos, por así decirlo. Sólo un par de personas sabían que era una Gema, la buscaban como un orbe y había una alta recompensa en el mercado negro.

—¿Estuviste con él en ese lugar?—negó ante la pregunta de Bruce.

—Peter solía contarme esa historia cuando no podía dormir—le dijo con voz suave—desde cómo la sacó de ese lugar hasta cómo llegó a sostenerla en sus manos salvando a la galaxia.

—Yo sí estuve allí—Rocket metía sus palillos a la comida—no es que importe, verdad...

—Espera, ¿sostenerla?

—Si, Antonio—le miró—mi novio, al que llamaste tonto, sostuvo la Gema del poder sin morir porque es un héroe.

—Y que su papá es un planeta—añadió Rocket.

—También. Pero fue más por lo que yo dije.

—Estoy muy confundido en este momento—confesó Scott mirándola—¿tu novio es un hombre-planeta?

—No planeta, celestial.

—Si...quedé igual.