VOLUNTAD (Encontré mi One Piece II)

27. Tama.

Milagrosamente, y gracias a Shinobu (una kunoichi que apenas acababan de conocer) pudieron salvarse del ataque de Kaido.

Yara estuvo el resto del día en silencio. Nadie tampoco quiso hablarle al verla en aquel estado, no se podía distinguir si estaba asustada, preocupada, decepcionada o frustrada.

Y la verdad, es que eran todas las anteriores.

Cuando volvió a ver a Law, éste les contó todo lo que había ocurrido con Kaido y Luffy, y eso solo hizo que la pelirroja empeorara anímicamente.

-No quiero que te alteres...

-¿Cómo me puedes pedir eso tú? -le reprochó a su amigo.

-No vale la pena perder el tiempo enojándose con Mugiwara-ya. A estas alturas me sorprende que no lo hayan aprisionado antes.

-Tiene su lado positivo -pensó Yara en voz alta- No van a sospechar del plan con el clan Kozuki.

-Que algo bueno salga de su estupidez -manifestó el pelinegro, resignado.

Aún así, Yara se sintió culpable. Pensaba en lo idiota que fue al dejar que Luffy se marchara solo, aunque sea podría haber perdido junto a él.

-Iré a tomar un poco de aire... -le dijo a su amigo.

-Oye -Law la tomó de los hombros- Todo va a estar bien.

-Lo sé -le sonrió.

Yara se aproximó al lugar donde acostumbraba a meditar.
De a poco podía concentrar su aura de mejor manera, lo cual significaría un power up importante para ella.

-Oi, Yara -le habló Chopper, sacándola de su pequeña sesión de meditación- Hay una niña que O-Kiku me pidio revisar, ¿Me acompañas?

-¿Revisar de?

-Quedó malherida con el ataque de Kaido -dijo cabizbajo.

La mujer se sintió culpable, al fin y al cabo había sido culpa de ellos. Finalmente accedió y acompañó al renito.

Aunque al llegar al hogar de la pequeña, no hizo mucho. Solo se limitó a opinar mientras Chopper y otra enfermera mink hacían el trabajo.

"Hasta para eso soy inútil", pensaba.

La niña despertó muy feliz y agradecida por las atenciones.

-¿Eres amiga de Luffy? -preguntó Yara, intentando acoplarse a la conversación.

-Sí, mi hermanito ha sido muy bueno conmigo -sonrió- Excepto por esa vez que...

Calló, con la mirada triste.

-¿Qué te hizo? -preguntó la mujer con el ceño fruncido.

-Me dijo que mi otro hermanito había muerto.

-¿Ah, sí? -miró de reojo a Chopper, quien tampoco entendía la situación- Pues, lo siento mucho. ¿Quién era?

-Su nombre es Ace.

Yara sintió su mundo paralizarse cuando ese nombre salió de su pequeña boca.

-¿Cómo dijiste?

-Mi hermanito Ace, me prometió volver con su tripulación pirata para llevarme de aventuras al mar.

Los ojos de Yara se llenaron de lágrimas y su pecho subía y bajaba sin control.

Su cabeza llegó a doler por la cantidad de recuerdos que se vinieron a su cabeza.

Y la historia de esa pequeña y pobre niña que se había ganado su corazón.

-¿T-Tu eres... Tama? -musitó, incrédula.