VOLUNTAD (Encontré mi One Piece II)

FILM RED - ESPECIAL PT. 1

El mundo está cambiando, es una realidad. Una nueva era estaba comenzando y todos querían tener su parte en ella. Todos querían destacar, cumplir algún sueño, luchar por una meta.

Existían personas que producían visiones divididas con sus acciones, como los piratas, por ejemplo. Siendo admirados por muchos y repudiados por muchos igualmente. Otras figuras comenzaron a surgir y viralizarse por su poder inspirador a la población.

La sensación del momento era Uta, una cantante que con su voz deleitaba a quien fuera que la escuchara. Todos estaban encantados con ella, causándole su fama y poder. Tenía fans repartidos por todo el mundo y otros que no asumían ser fans, pero la apoyaban en secreto.

Curiosamente los Mugiwara, a pesar piratas muy temidos en la actualidad, tenía a casi todos sus miembros obsesionados con Uta, de forma secreta claramente. Pero una vez se anunció el gran concierto en Elegia, la isla de la música, todos revelaron su fanatismo y acordaron asistir. Yara mantuvo silencio durante todo el camino a la isla.
Una vez arribaron descendieron del navío con mucha emoción.

-Yara, ¿Tu no vas? -preguntó Luffy extrañado al no verla bajar del Sunny.

-No me gusta la música -mintió- Los conciertos y lugares con ruidos fuertes y muchas personas me ponen incómoda. Pero diviértanse, yo cuidaré el Sunny.

-¿Estás segura? -le insistió Zoro, a lo que ella asintió.

No había forma de que fuera a verla.

Caminó alrededor del barco escuchando los ruidos provenientes del concierto que ya había comenzado.

Finalmente, se recostó en la proa a dormir una siesta.

Mientras caía presa del sueño, diversos recuerdos aparecieron en su cabeza.

-¿Por qué no vas a jugar con los chicos? -preguntó Shanks a una pequeña Yara.

-No me gustan sus juegos -respondió seca, devolviendo su vista al libro de medicina que estaba leyendo.

-Makino me ha contado que tu juegas mucho con Luffy, ¿Es eso verdad?

Ella asintió.

-¿Es por Uta?

Yara no respondió.

-Yara, es hora de dejar el resentimiento que tienes con tu hermana.

-No hay ningún resentimiento.

-Vamos, un 98% del tiempo estás molesta con ella.

-Y el otro 2% la soporto, creo que es suficiente.

-Somos familia Yara, deben llevarse bien -acarició el cabello de su hija- Iré a ver qué están haciendo.

Yara devolvió su vista al libro, pero solo sentía ganas de llorar.

Que Shanks haya venido a visitarla fue lo mejor que pudo pasarle, pues lo extrañaba mucho a él y a la tripulación. Pero Uta...

-¿Qué tienes, pequeña? -Benn Beckman se sentó a su lado.

-Nada.

-Has estado en la misma página por más de una hora. El jefe es alguien quien no notaría un detalle como ese, pero yo sí. Algo te ocurre.

Yara mordió su labio.

-Es por Uta, ¿Verdad?

-¿Por qué a mi me enviaron aquí y ella sigue con ustedes? -dijo con la voz quebrada.

-Queremos que estudie en algún lugar donde pueda potenciar su talento con la música.

-Claro, el talento...