Женщины (RusMex)

🪷 𝕻𝖆𝖗𝖆𝖎́𝖘𝖔 𝖙𝖗𝖔𝖕𝖎𝖈𝖆𝖑 🪷

La mañana era espléndida. El cielo era azul y despejado, habían algunas nubes blancas que adornaban el cielo. Las gaviotas pasaban por encima de sus cabezas. Era un hermoso paraíso tropical. Rusia estaba en el balcón de su hotel intentando agarrar señal. Llevaban una semana y media de viaje y no había tenido oportunidad de contactar a Sandy para decirle donde estaba. Vestía una camisa blanca abotonada y un pantalón beige holgado. Rendido, regreso su vista a la playa. Acapulco le parecía más bello de cerca que en las fotos.

Regresó a su cuarto de hotel, agobiado. Se recostó sobre su cama intentando ver qué podía hacer mientras. Escuchó algunos golpes en la puerta, así que fue a revisar quien era. Encontró a México del otro lado de la puerta.

—Buenos días, Ana —le regaló una sonrisa como siempre—. Esta haciendo un día precioso, ¿no crees?

—Да (Si) —muy seguramente quería decirle algo, así que no quiso interrumpirlo más.

—Vine a invitarte a nadar con nosotros —oh, no, eso no era nada bueno—. Ándale, ya te vi que no quieres. Pero llevas dos días encerrada aquí, inténtalo por lo menos, ¿si? Puede ser divertido.

—México... —este le brindo una mirada suplicante, una que él no pudo resistir—. Esta bien, pero si no me gusta regresaré a mi habitación.

—Gracias, princesa —le dio un abrazo rapido—. No te arrepentirás, ya verás.

Dicho esto, se alejó del lugar. Rusia vio el traje de baño azul que portaba México. Le parecía chistoso que mientras él podía llevar un short como traje de baño, él tenía que llevar un maldito bikini que no dejaba nada a la imaginación. Cerró la puerta de su cuarto y revisó dentro de su maleta. Sacó de ella un bikini negro, lo miraba con dudas y cierto horror. Mucha gente iba a verlo aquel día, y lo iba a ver de esa forma. No sabía cuántos morbosos habían en esa playa. ¿Y si mejor no iba? No, le había asegurado a México que iría con ellos, no podía decepcionarlos.

Se probó el traje de baño, luego se asomó al espejo de cuerpo completo. Cerró los ojos antes de observarse completamente. Los latidos de su corazón incrementaban su velocidad. No deseaba verse mal, ni mostrar demasiado su cuerpo. Abrió los ojos lentamente, encontrando una figura femenina con un bello bikini. Afortunadamente, Chile le había escogido uno que no mostrará demasiado por delante, le parecía bien. Pero... ¿Y la parte de atrás? Se giro un poco observando su trasero, ahí maldijo por lo bajo.

—Черт, он действительно не лгал, когда сказал, что все костюмы такие (Mierda, en verdad no mentía cuando dijo que todos los trajes son así) —si, no cubría por completo esa zona como él deseaba, pero al menos tampoco estaba tan descubierto—. я не так уж плохо выгляжу (No me veo tan mal)

Se dio cuenta de que hablaba solo, así que se alejó del espejo, colocándose un vestido sobre el traje de baño para salir a la playa. Iba a sorprender a México y Chile con aquel traje o se arrepentiría en el intento, quién sabe. Aún seguía algo acomplejado, pero iba aceptando su nueva forma poco a poco. Por lo menos ya podía decirse que en ocasiones hasta se sentía bello, todo ese avance lo había logrado gracias a Chile y Sandy.

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Chile estaba jugando voleibol con algunas personas en la playa. Observaba de tanto en tanto a su hermano, quién se encontraba en un camastro bajo una sombrilla. Esperaba a Rusia, quién ya se había tardado un rato en aparecerse. Pensaba que quizás le había convencido de venir con ellos a divertirse, pero quizás no deseaba estar en aquella playa, después de todo era rusa, quizás no estaba acostumbrada a los climas cálidos.