Capítulo 29

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JiMin

Tan pronto como dejamos Sovereign, Fallon y yo nos fuimos en auto hasta el Wardolf Astoria para nuestra noche de bodas. Tate pensó que todos deberíamos salir para cenar pero HoSeok captó la indirecta.

En todo el camino hasta ahí, mientras el botones se llevaba el auto y completamos el registro he permanecido frotando mi dedo meñique en mi anillo de mi boda. La molestia por algo nuevo cuando yo nunca había llevado joyas, con la excepción de mi piercing, contrastaba con el hormigueo que sentía en mi mano.

Era raro pero también poderoso.

El anillo me recordaba que yo era de Fallon. Me recordaba que yo era su protector, su amante, su pareja.

Finalmente se me ocurrió que el anillo también significaba que no podía ir y venir como me gusta, no podía mirar a otras mujeres, y yo era probablemente la única persona en mi escuela secundaria y clase de graduación que ya estaba casado, pero no me importaba mucho lo que otros pensaban ahora.

Estaba bien con esto. Estaba todo bien para nosotros.

En el momento en que llegamos al ascensor, las manos de Fallon estaban haciendo cosas que técnicamente no se permitían hacer en público, y yo estaba jodidamente contento de que HoSeok y Tate nos hubieran dado espacio.

Fallon tenía su mano debajo de mi abrigo, masajeando mi espalda baja. Estaba enterrando su nariz en mi pecho mientras caminaba con mi brazo alrededor de ella. Sus ojos me miraban diciendo todo lo que tenía en su cabeza, pero no podía sacar de sus labios.

Tan pronto como las puertas del ascensor se cerraron, la empujé contra la pared y me incliné hacia su rostro, el aliento caliente corriendo contra el mío.

—Fallon Park —desafié, empujando con fuerza contra su cuerpo—. Qué crees que estás haciendo, ¿eh?

Sus dedos empezaron a trabajar en el botón de la camisa debajo de la chaqueta abierta.

—Lo siento —jadeó contra mis labios—. En este momento estoy realmente lista para mi marido.

Y de pronto sus manos estaban dentro de mi camisa, por todo mi pecho desnudo y mi labio inferior estaba entre sus dientes. La cogí por la parte posterior de los muslos y la cargué contra la pared, succioné su boca y degusté el crudo calor que hace a mi polla brincar y endurecerse. Necesitaba quitarle su jodida ropa.

—Y no voy a cambiar mi apellido —dijo entre besos.

Sentí la risa en la garganta y pensé que sería muy mala idea dejarla salir en este momento. Era mi noche de bodas. Quería tener un polvo al fin y al cabo.

—Sí lo vas hacer —manifesté con toda naturalidad mientras ponía la mano entre sus piernas y frotaba.

El ascensor se detuvo y la puse de pie. Gracias a Dios no había nadie en las puertas porque estábamos enrojecidos y sin aliento.

Arrastrándola del brazo, saqué del bolsillo de mi abrigo la llave de la puerta.

—Entonces voy a separarlos con un guión —murmuró detrás de mí y me costó dos segundos recordar que está hablando de los apellidos.

—No, no lo harás. —Deslicé la llave, abrí la puerta y la empujé dentro—. Poner un guión entre los dos apellidos es como decir NO QUIERO RECONOCER LA DERROTA cuando la verdad es que la mujer que separa sus apellidos con guión ya ha perdido. Los hombres no separan los apellidos con guión —señalé cerrando la puerta detrás de mí, hundiendo lento los talones en la alfombra de felpa mientras la acechaba—. Ahora vas a ser Fallon Park porque me amas, deseas hacerme feliz y quieres que todo el mundo sepa que eres mía.

Enemigos {F.A.S; #2} ➳ Park JiMinDonde viven las historias. Descúbrelo ahora