~One Shots ~ Spiderverse

(2/4) ~Give me attention~ 🔥

Miguel: puede que Miguel sea un asco disimulando su ira y frustración, pero en cuanto a lo sexual, es impecable.

Nadie sospecharía que el líder de la organización esta obsesionado, casi rozando lo insano.
Nadie imaginaría que... solo por una sonrisa de ella, estaría duro todo el día.
Y en cuanto ella le diera una chance segura, se lanzaría de cabeza. De 0 a 100 en un segundo.

~•~

—¿Qué tal el nuevo traje?—

—Es muy cómodo y bastante intuitivo.—

Los ojos de Miguel se paseaban por todo el cuerpo ajeno, mientras su mente divagaba con la idea de que debajo de esa fina capa holográfica ella no traía nada más. Suspiró pesado.

—¿crees que pueda cambiar el color?—en cuanto ella lo miró, Miguel desvió la mirada hacia sus ojos, sin que notara que la comía con los ojos.

—¿A qué color? Creía que te gustaba el color ocre.—ella sonrió.

—¿Y cómo sabes eso?—

—soy muy observador.—alzó las cejas divertido.

—Bueno, jefe. Le acertaste. Me gusta el color, pero lo quería un poco más oscuro... ¿Se podrá?—

—Sí, sólo... Déjame ayudarte.—

Miguel se acercó a la mujer, quien lo miraba con cierta fascinación.

La verdad era que con solo pedirle a Lyla que desplegara la gama de colores, ella podría elegirlo manualmente. Pero Miguel quería aprovechar el momento.
Su mano viajó al hombro de la mujer, donde tocó un pequeño sensor cercano a su cuello. La sintió tensarse, y eso lo volvió loco. Hizo un gran esfuerzo por mantenerse tranquilo.

—Dime cuando te convenza ¿Si?—tomó la mano de la chica y la estiró apenas, para que pudiera ver la variación de color.

Su dedo se movía lentamente sobre su cuello, haciendo que no solo el color del traje variara. El rostro de la mujer estaba completamente rojo.

—... ¿Qué tal ahora?—Miguel mantenía la mirada en la mujer—. ¿Te gusta?—

En cuanto los dedos de Miguel pasaron de hacer contacto con el traje a tocar la piel de la mujer, ella se estremeció.

—Asi esta bien...—se alejó nerviosa—. Creo que este color es... Mejor.—

Miguel volvió un poco en si, sonriendo apenas.

—Es lindo, sí... Combina con tus ojos...—

—¿Si? Bueno, genial... Ya... Debo irme.—

La chica se despidió nerviosa, dejando la oficina en un segundo.

~... Tu pulso se esta acelerando.~

Lyla sabía muy bien el problema de Miguel con esa mujer, lo mal que lo traía. Y también sabía muy bien cuando debía mandarlo a casa.

—Iré... Iré un momento al baño ¿Bien? Si alguien me busca, dile que vengan en otro momento.—el hombre se encaminó apurado a la salida de la oficina.

~... Tengo que hacer algo con esta situación...~

~•~

Era medianoche cuando ____ se deshizo de aquel villano. Le resultó algo extraño el accionar del tipo, por lo que creía que lo mejor era informarlo a Miguel.
Intentó contactar con Lyla, pero por alguna razón no le contestaba. Asi que fue en persona al lugar.