El Amante del Dios del Sol

Capítulo 22

JiMin despertó, miró a su alrededor y seguía en la época moderna, suspiró, quería que YoonGi sintiera a su pequeño bebé.

Se levantó con cuidado y lo primero que hizo fue saludar a su bebé, quería que YoonGi lo acariciara como cada mañana que despertaba en el Antiguo Egipto. YoonGi lo despertaba con besos en su mejilla, acariciaba su pancita, lo acompañaba en el desayuni y luego se marchaba a cumplir con sus obligaciones, volvía oara almorzar juntos y el resto de la tarde se dirigían al campo para caminar, JiMin amaba todo eso, apreciaba que YoonGi fuera tan dedicado con él.

Salió de su tienda luego de lavarse y cambiarse de ropa, y sintió miedo...

Lee estaba en el campamento creando un alboroto, otra vez, y tuvo más miedo cuando notó su presencia, por instinto llevó sus manos a su vientre, temió que le hiciera algo a su bebé. Le asustaba no poder protegerlo, su bebé solo lo tenía a él para cuidarlo. Supo que lo había visto y la furia fue líquida en sus ojos, nunca se había sentido tan asustado, Lee nunca le provocó miedo, solo había desisteres de parte de él, ni siquiera lo forzó pero seguía siendo un irrespetuoso.

- ¡Protejan a JiMin!- NamJoon dice en cuanto observa que la distancia es corta, Lee podeía hacerle daño.

- ¡JiMin!- su grito logró crear escalofríos en él. JiMin solo negó, todos los chicos empezaron a rodearlo, mientras Hyuk lo golpeaba logrando desestabilizarlo. NamJoon logró colocarse sobre él, inmovilizandolo, debían proteger a JiMin y al pequeño príncipe.

- ¡No dejen que se acerque!- Eun dice y WonHo se pone a la defensiva, era el mejor con navajas del imperio egipcio. Había sido colocado como guardia personal de JiMin, por orden de la reina, el sirviente más confiable debía cuidar a la pareja de faraón, y ese sirviente era él. Desde la llegada de JiMin al palacio, fue un guardia en las sombras, JiMin no debía percatarse de su presencia en ningun momento, debía ser sigiloso y pasar desapercibido para el menor, lo que menos quería la reina era que se asustara.

JiMin por un momento no supo que sucedió, solo quería protegerlo a él y a su pequeño, su bebé debía nacer, le prometió a YoonGi cuidarlo, y Lee parecía enfurecido al ver su estado.

- ¡Hijo de puta!- Lee gritó- ¡Por eso me dejaste!- la ira era visible en sus ojos. Hubo una ráfaga de viento con arena, que les privó de la vista por unos breves instantes hasta que se desvaneció por completo.

JiMin solo se abre espacio mirando a quien aparece caminando. Es él...
Se ve completamente diferente, no tiene sus ropas reales del Antiguo Egipto, no luce como un faraón, no tiene ni el maquillaje egipcio característico, luce como un hombre de su época, como algún profesional que está de paseo, sin embargo, eso es lo de menos, lo importante es que llegó por él y su bebé.

- YoonGi...- le llama, sus ojos se llenan de lágrimas, no sabe si es un sueño o qué es, pero está tan feliz de verlo. Camina lo más rápido que su vientre le permite, YoonGi va a su encuentro y lo abraza con cariño.

- Mi hermoso sol...- YoonGi afirma el abrazo, sonriendo al tenerlo entre sus brazos, lleno de satisfacción al escucharlo reír tímido pero satisfecho por la forma en que lo ha llamado, pero volviendo su vista hasta Lee, quien esta mirandolos desde el suelo.

- ¡Ese hijo es mío!- brama con ira, JiMin se estremece, YoonGi detesta verlo asustado su sol solo debe ser feliz.

SeokJin quien estaba detrás junto a TaeHyung y HoSeok, levanta su arma. YoonGi le detiene, cubre a JiMin con su cuerpo y sonríe.

- Te atreviste a mucho, olvidaste quien eras...- YoonGi le dice mirandolo de manera altiva- Ni siquiera sabes delante de quien estás... y aun así intentaste atacar a mi esposo y padre de mi hijo, te tengo una noticia, jamás volverás a verlo...- YoonGi deja a JiMin junto a TaeHyung, y camina hasta Lee.- Mereces la muerte...

Lee lo mira, nunca había visto un ser tan frío como el hombre que estaba frente a él.

- Alteza, ¿qué haremos con él?- Eun dice presentandose ante YoonGi, quien inclina levemente su cabeza como reconcimiento.

- Fui misericordioso al darte una muerte rápida, la primera vez... sin embargo, esta vez no tendrás la oportunidad, tu sangre correrá y no habrá forma de que vuelvas a atacar a mi familia- YoonGi declara- ¡Llevenselo!- los chicos más corpulentos lo toman, y aunque Lee grita porque teme lo que le harán, pero en ese momento parece que nadie lo escucha, JiMin solo vuelve a los brazos de su esposo...

- Mi sol...- JiMin lo mira, no puede equivocarse, es su YoonGi, su faraón.

- YoonGi...- sonríe y las lágrimas fluyen, despertar tantas veces en su mundo le daba miedo, le aterraba no volver a ver al padre de su bebé, quería que YoonGi lo conociera.

- Aquí estoy... contigo y nuestro príncipe...- YoonGi sujeta sus mejillas y le besa, el suspiro satisfecho de JiMin le hace sonreír a él.- ¿Cómo se ha portado?

- Digno hijo de faraón...- JiMin le responde, en ese instante solo existen ellos, Yoongi tocando su pancita y él con el corazón latiendo enamorado.- Ha comenzado a moverse...- le dice con emoción.

YoonGi en ese momento mira a todos aquellos que se encargaron de cuidar a su pareja y heredero...