22. 𝐁𝐚𝐢𝐥𝐞

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La promesa de HyunWoo acerca de los invitados se cumplió al pie de la letra y quienes estaban presentes a cada momento le hacían saber al alfa lo mucho que se divertían, como si llevaran tiempo sin disfrutar de una buena noche pese a las reuniones mensuales del clan.

Los meseros que contrataron no eran de un lugar con prestigio pues KiHyun añadió a último momento no presumir de lujos y en su lugar dar empleo a quienes lo necesitaban; por fortuna era tanta la alegría que abrazaba el ambiente que los meseros no tenían tiempo de parar a descansar y con gusto corrían a cada llamado. La paga de HyunWoo era generosa y el alfa estaba dispuesto a dar más por el cansado trabajo y las horas extra de la exitosa celebración.

— ¿Otra copa?

Las bebidas empezaron a desaparecer después de medianoche. La personas bailaban sin importar cómo los vieran o quién estaba a su lado; KiHyun se sintió lleno al ver a su familia disfrutando de una danza extraña con gente que ni siquiera él conocía pero le encantaba que todos (familia o no) tuvieran un momento agradable libre de prejuicios.

— ¿Te vas a tomar esa también?

KiHyun rodó los ojos con fingida molestia:

— ¿Ahora mides lo que bebo?

— Sólo no quiero tener que cargarte después… pesas bastante. — respondió HyunWoo y KiHyun lo golpeó en el brazo antes de que se riera. — ¡Hablo en serio! No tienes idea de cómo quedó mi brazo después de que te durmieras sobre él.

— Ya veo — dijo viendo otra vez a la multitud que se divertía a escasos pasos de ellos. — ¿Crees poder bailar aún si estás herido?

HyunWoo casi escupe la bebida por la repentina invitación pero no tuvo tiempo de responder: KiHyun tomó su mano y lo arrastró hasta un rincón de la pista con seguridad.

— No me mires así. — se quejó KiHyun viendo a las parejas a su alrededor buscando un estilo de baile que imitar aunque la cara estupefacta de HyunWoo lo distraía.

— ¿Bebí demasiado y estoy imaginando todo?

— No — respondió alzando la mano de HyunWoo que se mantenía entrelazada con la suya y después giró. — Sólo me estoy divirtiendo. ¿Está mal?

— ¡No! No, en absoluto.

Y como la música cambió a una canción a una más lenta, KiHyun movió la otra mano de HyunWoo a su cintura para acercarse y susurrar al oído del moreno:

— …Pero hay algo que me divertiría mucho más…

HyunWoo lo miró con terror, como si no supera a quién tenía frente a él; sus orejas estaban rojas y sus mejillas luchaban por alcanzar el mismo tono carmesí mientras KiHyun asentía sin una pizca de vergüenza.

— No los entiendo. — murmuró HyungWon viendo de lejos la escena. En su mano derecha descansaba una copa de vino tinto de la que bebía despacio y con asco por la situación de su mejor amigo y compañía.

Una silla a su espalda chirrió y HyungWon no sintió curiosidad por ver quién estaba de pie a su lado.

— ¿Quieres bailar, bonito?

El chico que estaba a su lado era alto, de cabello azulado, ropa cara y sonrisa brillante, un tipo amable pese a su facha de hijo de papi, pero HyungWon en realidad ni sentía curiosidad ni nada por él.

— ¿Es necesario? — musitó con fingida felicidad pero en su campo visual apareció cierto rubio con desmesurado orgullo que le hacía la vida imposible y su respuesta cambió.

— Por supuesto que no, amor, pero vinimos a divertirnos y…

HyungWon no esperó a terminar de oírlo, lo tomó del brazo y lo guió hasta el resto de personas bailando. El chico sonreía mostrando todos sus dientes de la felicidad y HyungWon evitaba hacer contacto visual con él, así empezaron su incómodo baile aunque para SamJun fuera perfecto.

𝐏𝐥𝐞𝐧𝐢𝐥𝐮𝐧𝐢𝐨 ❩ ˢʰᵒʷᵏⁱDonde viven las historias. Descúbrelo ahora