Cinnamon Girl | Roier

08

—Queremos que el Mariana, nos baile la pelusa. —Murmuré para luego comer mi taco, que amablemente Uber eats nos había traído después de las eliminaciones.

Bueno, Spreen había salvado a Molly, y quién se fue esta semana era Barca. Alana estaba triste por eso, ya que es su novio.

—Navi, eres una imprudente. —Me sapeó Mariana.

—Ya bastaaaaaa, siempre me matas las neuronas. —Bufé. —Mejor me voy con el Roier, él si me trata bonito.

—Ven aquí, Mensa. —Me dijo jalándome.

—Autsilio.

—Ya deja a la niña, Osvaldo. —Lo regañó Aldo. —Estás viendo que está en pleno desarrollo y tú le matas las neuronas, la vas a dejar más pendeja.

—Si, si, hazle caso, ¡Oye! —Me quejé y ellos se rieron.

Me fui a sentar, ya me había puesto algo más cómodo, así que ya no tenía el trasero al aire libre.

—¿Spreen? —Llamé y él me miró, pareciendo distraído. —¿Y Carre?

—Ya se fue.

—¿Cómo que se fue? —Preguntó Roier.

—Ah... al parecer el papá de Carre falleció. —Murmuró y todos se quedaron sorprendidos. —Carre salió de la casa para ir con su familia, la producción dijo que estaba bien.

Me quedé en silencio, yo era la peor persona que podría decir algo.

Durante las siguientes horas, nadie había hecho casi nada, se podría decir que estábamos de luto junto a Carre.

°°°

—Esto está muy aburrido. —Murmuré dejándome peinar por Ari.

—Pues si, pero de alguna forma estamos demostrando apoyo a Carre. —Murmuró tomando un cepillo y algo de gel para peinarme.

—Ya, pero no estoy muy segura si a él nos gustaría vernos así, todos tristones. Digo, no sé lo que se siente perder a alguien, y en verdad no quiero sonar como egoísta o algo parecido. Pero creo que a Carre le gustaría reírse de nosotros, al menos cuando vea después los clips y eso.

—Creo que la pelotuda tiene razón.

—¡Exacto! ¡Oye! —Me quejé.

—Carre amigo, si ves ésto en algún momento, lamentamos mucho lo que sucedió con tu padre... estamos contigo, y espero que cuando puedas vernos, logremos sacarte una sonrisa.

—¡Te queremos mucho, Carre! —Exclamó Ari con una pequeña sonrisa.

—Yo la verdad no siento como que deberíamos estar tan normales, creo que es una falta de respeto. —Murmuró Alana con preocupación.

—Pero la gente está viéndonos para hacer pendejadas, la verdad es triste por Carre, pero si no hacemos algo divertido el programa no funciona. —Dijo Molly.

—Yo pienso que deberíamos estar como siempre, pero manteniendo respeto por lo que sucedió. —Murmuré haciendo una mueca pensativa.

Ari terminó de peinarme, así que fui al espejo y me sorprendí.

—No pues ya decía yo que le faltaba un bañito y una peinadita, y ya quedaba. —Dijo burlón Roier.

—Callese, mion.

—¡Oye!

—Ahora te falta ropa. —Murmuró Ari, yendo hacia su maleta para sacar algo coqueto.

—Que no muestre mucha piel, por favor, ayer me sentí muy encuerada.