Prometí Cuidarte

Capitulo. 37

Después de lo que estresante para muchos esas dos semanas que habían pasado, se habían acabado y muchos podían volver a sus actividades normales, como lo era él equipo de fútbol que regresaron a sus entrenamientos habituales donde esta vez Jael si podía ser parte de ello junto a Karina. Para nadie fue una sorpresa que pronto lo que había pasado al final de partido con Jake y Tiffany no empezará a divulgarse entre los alumnos.

Muchos tenían opiniones diferentes y versiones también, la historia no siempre se cuenta igual en diferente boca, pero quienes lo habían presenciado podían sentir lo que era para Tiffany caminar ahora por los pasillos y que voltearan a verla como la "rechazada" y sí era algo que ya se sabía, que Jake no iba a aceptarla pero, de solo ver intentos fallidos por parte de la rubia a ya pasar a un directo rechazo por parte de Jake, era todo muy diferente.

Jael estaba seguro que por dentro Tiffany ardía de rabia, y que seguramente estaba planeando su venganza por algún rincón de las instalaciones, aún así Karina le advirtió que tuviera cuidado porque ella sabía que clase de persona era esa chica y era una muy obstinada y para nada acostumbrada de no tener todo lo que quiere.

Eso le asustaba, pero no demasiado, es decir siempre estaba con Karina o con Jake, no podía pasarle nada. Además él creía que era mejor aceptar el rechazo a humillarte todavía más. Pero quién sabe, no conocía lo suficiente a Tiffany.

...

- Vamos cariño, tengo que entregarle esto al entrenador. - dijo la pelirroja señalando un papel que tenía en sus manos.

- ¿Qué es? - preguntó él castaño tratando de ver de reojo el papel.

- Son los alumnos que podrían tener preferencia por excelencia deportiva. Ya sabes la escuela busca nuevos talentos y ahora que ya se acerca el fin de año, buscan alumnos de nuevo ingreso con talento en el fútbol - explicó mientras caminaban hacia las oficinas de maestros.

- Entonces ¿Aceptan esos alumnos por qué son buenos en el deporte? -

- Si, básicamente. -

Era cierto, se acercaba el fin de año, lento pero al mimos tiempo apresurado, rápidamente tendría que buscar a qué preparatoria quería presentarse y estudiar para el examen. Su principal opción era esa preparatoria, después de todo no se podía discutir su excelencia tanto en nivel académico como en nivel deportivo, pero ¿Y qué pasaba si no era lo suficiente bueno? ¿Si fracasaba?, No quería presionarse todavía pero era necesario.

Llegaron a la oficina de maestros y al parecer el entrenador no estaba.

- Ah, me dijo que estaría aquí ¿A dónde se habrá ido? - se quejó la chica a su lado. - Uhm, bueno supongo que puedo dejarle la hoja en su escritorio. - camino hacia el escritorio del susodicho y dejo la hoja encima de este.

- Y tu cariño? ¿Ya sabes a dónde quieres irte a estudiar? -

- Bueno, pensaba aquí, creo que es una buena idea. -

- Sin duda, es lo mejor - dijo alardeando Karina y ambos rieron. - Bueno si aquí termina siendo tu opción serás más que bienvenido. - le sonrió amablemente.

- Regresamos al campo, ya deben estar por terminar su entrenamiento. -

Los dos salieron de las oficinas y caminaron de vuelta al campo.

- Karina, dijo la maestra Ericka que quería que fueras a su oficina. Que te iba a dar la lista del viaje - dijo de repente llegando una chica frente a ellos.