Después de que dejarán el lugar, aún con algunas miradas sobre ellos. Jael no quiso decir nada en el camino por el simple hecho de que estaba avergonzado. No imaginaba que ese día iba a suceder así y tampoco que los demás eran tan entrometidos en la vida de los demás, pero de igual manera no podía dejar escapar las miradas hacia él pelinegro. Era una combinación de varias emociones que lo empezaron a hacer sentir mal.
Llegaron a la casa del castaño y esté no quiso soltar la mano del mayor a pesar de que no lo estaba viendo. Pero aún así Jake se agachó a la altura del menor y levantó su rostro lentamente solo para encontrarse con la carita de incomodidad de su novio, quién no pudo dirigirle la mirada y solamente atinó a soltar la mano contraria lentamente.
- ¿Qué pasa, mí niño? ¿Qué fue lo que estuvo mal? ¿Te molesto algo? - preguntó con preocupación denotada en su tono de voz.
- Lo lamento... - contesto en un tono más bajo.
Jake negó de inmediato queriendo hacerle saber que él no había hecho nada malo y tomó su cintura para atraerlo hacia él en un abrazo sobando su espalda.
- No, esta bien. No hiciste nada malo, no es tu culpa... Jamás vuelvas a disculparte sin que hayas echo nada. - acarició un par de mechones del cabello contrario.
Jael abrazo al pelinegro, pero reaccionó recordando algo y se separó rápidamente del cuerpo contrario. Lo había olvidado, Jake tenía que regresar para sus prácticas y él solo lo estaba distrayendo con sus lloriqueos de niño.
- No, ya tienes que irte. Se te hará tarde -
Jake entendió porque lo decía, pero se negó a irse y en su lugar se acercó al más bajo para tomar sus mejillas con suavidad y levantar un poco su rostro.
- No importa que tenga que hacer, a dónde debía ir o incluso si voy tarde. Siempre serás tú primero, si me necesitas estaré ahí para ti, no interesa donde esté o lo que deba hacer ¿Entendido? - no dió tiempo de que Jael formulara palabra, cuando cerró la distancia entre sus rostros para unir sus labios en un dulce beso, que hizo al castaño olvidarse por unos instantes de lo que había pasado en su escuela.
Se separaron por señal de Jael, quién tuvo que tomar un poco de aire y miro al contrario quién le sonreía, haciéndolo sonrojarse y separarse un poco de él.
- B-bueno, ya... Estoy bien, p-puedes irte. - asintió haciendo un movimiento con su mano indicándole que se fuera.
Jake soltó una pequeña risa y dejo un último beso en la frente del menor para después irse, aunque en ese momento odiara sus prácticas por tener que hacerlo regresar rápido o de lo contrario su entrenador le pondría una sanción. Pero lo vería mañana de nuevo como todos los días, aunque ahora sonaba a qué ambos debían esperar mucho. Debía ponerse manos a la obra para pasar más tiempo con su novio. Había querido tanto eso desde que empezó a hablar con él menor, que no iba a permitirse que algo lo arruinara.
Por Jael, él había decidido que ya no iba a darle tantas "noticias" exclusivas a sus amigos, porque entonces no se quedaría nada para él y quería también que algunas cosas solo quedarán entre Jake y él, aunque claro cualquier novedad más importante se las haría saber. Pero ahora debían esperar.
Pero, no se podía salvar de sus padres, quién al llegar le preguntaron cómo le había ido con Jake, y si él respondió que estaba bien, como siempre lo había acompañado a casa y así... Se iba a guardar ciertos detalles para él, tampoco quería contar exactamente como habían sucedido las cosas... Eso era para él.
...
Al día siguiente, sus amigos estaban ofendidos por no haber recibido su "reporte del día" pero él solo contestó que ahora tendrían menos chisme del que anteriormente les daba, él dijo que era por privacidad con su ahora novio. Sus amigos alegaron que de cualquier forma iban a enterarse de una u otra cosa. Y eso era verdad, cuando ellas querían saber algo, bien podían parecer agentes de la CIA.
Mientras las clases pasaban, Jael pensaba como sería la salida nuevamente con su novio, ¿Todos mirarían de nuevo? ¿Es que acaso no tenían una vida propia en la que deberían ocuparse? Bueno, tal vez no, pobres cositas feas.
Cuando las clases terminaron, todos salieron y Jake llegó de inmediato con ellos, se reservo acercarse al menor por lo que había sucedido ayer, no porque le afectara a él, sino al menor, eso le preocupaba.
- Hola - saludó Jake a los tres y acercó su mano a la cabellera de su novio, quién lo saludo de regreso.
Jael miro al más alto y después a su alrededor, claro iban a estar viendo de nuevo, pero ¿Dejaría que eso arruinara cuando se viera con su novio?... No quería que así fuera... Aquí que tragando toda su vergüenza, estiró su mano hacia él pelinegro quién la tomo con suavidad y lo jaló un poco hacia él, cosa que hizo que Jake entendiera el mensaje y lo abrazo rodeando él cuerpo de su novio.
- ¿Estás bien? - preguntó él pelinegro
- Sí - él castaño asintió a la pregunta y fue él primero en separarse de su agarre para después tomar la mano contraria nuevamente.
Ambos se despidieron de los otros dos chicos espectadores y tomaron el camino hacia la casa de Jael como todos los días.
Al llegar, ambos soltaron su agarre y él pelinegro fue quien lo jaló hacia él para abrazarlo nuevamente antes de irse. Esta era una de sus nuevas sensaciones favoritas y no pretendía desaprovechar ninguna oportunidad para hacerlo.
- Tengo que irme ¿Okey?. Nos vemos mañana - dejo un beso en la coronilla del castaño y se separó para rápidamente dejar un beso en sus labios haciendo sonreír al contrario.
- Okey, adiós. - se despidió moviendo su mano mientras lo veía irse por el camino donde habían llegado.
Creo que... Podía acostumbrarse a eso...
...
Y vaya que pudo... O bueno más bien más o menos... Estaba en el proceso.
Habían pasado varios días, y ahora Jael se estaba acostumbrando a lo que era con su novio, dejo de darle poco a poco importancia sobre los demás quienes parecían ya no ser una nueva noticia para ellos, porque ahora todo pasaba muy normal para todos y eso lo hacía más tranquilo.
Aún así, las vistas de algunas personas seguían en él pelinegro a quien realmente no le importaban nada y él solamente iba a ver y a acompañar a su novio. Lo que la gente hiciera siempre y cuando no afectara al castaño lo tenía sin cuidado. Él solamente quería cuidar al menor, solamente pensaba en él y lo mucho que lo quería y por las mismas razones si alguien se atreviera a siquiera tocarle uno de sus tan preciosos cabellos, iba a pagar las consecuencias.
Jake se lo había planteado, lo primero era su novio y siempre iba a ser él. No importaba que tuviera que hacer o dejar de hacer.
![](https://img.wattpad.com/cover/338629131-288-k613347.jpg)
ESTÁS LEYENDO
Prometí Cuidarte
Teen FictionJael, acaba de terminar con su novio, que era un total idiota y cree que no va a poder superarlo. ¿Llegará otro amor para nuestro protagonista? O ¿Seguirá amando a su antigua pareja?