¿Alguna vez te has imaginado casado con alguien que nunca podrías soportar en tu vida?
Jisoo nunca se había imaginado eso tampoco, todo lo contrario. Se suponía que sería solo otra mañana normal, Jisoo se despertaría, desayunaría con su familia, lue...
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"La luna viene a devolver todo lo que la oscuridad ha robado"
- Ah...
Suelto un gemido de dolor al intentar abrir los ojos, mi cabeza late, mis ojos siguen ardiendo y siento que mi nariz sigue obstruida. Ayer, después de regresar a la habitación, todavía llorando, me acosté con Tae y lo abracé, lloré hasta que me quedé dormida.
Mi cabeza no solo parece que va a explotar, sino que también es un gran desastre, no puedo encontrar una solución para todo esto, no tengo idea de qué hacer, qué dirección tomar. Ni cómo seguir.
Todo esto es una gran mierda, podría simplemente despertarme uno de estos días y recordar todo pronto. Sería menos agotador y doloroso.
Incluso con los ojos todavía cerrados, paso la mano por la cama y siento a Tae a mi lado, lentamente abro los ojos y giro la cabeza. Mi pequeño está ahí, todo acurrucado por la cama. Sonrío con esa imagen, es la mejor visión para tener por la mañana. Me quedo en los codos y me chasco el cuello, dos veces. Bostiendo me siento en la cama y después de estiarme salgo de la cama, pero vuelvo a darle un beso a mi hijo.
Mi hijo. Esto suena tan bien solo en mi cabeza. Estoy orgullosa de saber que es mi hijo, Tae es un niño excelente, además de súper inteligente es muy obediente y cariñoso. El hijo que siempre quise, incluso durante la adolescencia.
Voy al baño a lavarme la cara, mojar la nuca y suspirar. Ni siquiera sé qué hora es, pero debe ser temprano, todo está demasiado tranquilo.
- Uh...
Apenas salgo de la habitación y ya me enfrento a alguien, me tambaleo un poco y miro para ver quién casi me atropella. Rosé. Su cara arrugada deja claro que acaba de despertarse, no tenía ni idea de que había dormido aquí.
- Perdón, no te he visto.
Se disculpa torpemente y arregla su cabello desalineado, sonrío para tranquilizarla y ella suspira. Chaeyoung me mira fijamente, sé que quiere decir algo, sólo espero que no me dé un sermón.
- Buenos días.
- Buenos días.
Ella desvía la mirada y seguimos en silencio, eso ya me está molestando.
- Es... - Digo dos veces y levanto el tronco, ella me mira con curiosidad. - Entonces... ¿Quieres decirme algo? Estoy empezando a avergonzarme de tanto que me miras.
Confieso y ella presiona los labios, sin gracia baja la cabeza y me controlo para no reír.
- Oh... Perdón. - Pide tímidamente y yo solo sacudo la cabeza. - Ya me voy, er... Avisa a Lili cuando se despierte.
- Todo bien.
- Adiós, ChuChu. - Dame un beso en la parte superior de la cabeza y le asiné con la cabeza que está a punto de bajar las escaleras, pero para, susurra algo a sí mismo y gruñe. - ¡Maldición!
