Melodía de luna llena (Jinx)

XXVI

—Jaekyung te estuvimos llamando todo el día de ayer, ¿dónde estabas? — cuestionó el entrenador con molestia, mantuve la mirada gacha y Jaekyung como de costumbre lo miro desafiante.

—Estuve con Dan, no se sentía bien, ¿qué es aquello importante que tenías que decirme?

—Tienes una pelea en un par de meses, un extranjero ruso quiere ponerte a prueba— una risa burlesca salió de los labios de Jaekyung.

—Siempre dicen lo mismo y besan el suelo.

—Como sea, tienes que hacer todos los trámites, apenas y estamos a tiempo, programaré la sesión en unas semanas.

Pude escuchar el suspiro de exasperación que emitió Jaekyung, siempre hacia lo mismo en cada enfrentamiento, le gustaba mantener su título, pero el trámite siempre le causaba conflicto, las sesiones y todo eso lo consideraba innecesarios. A mí me gustaba ver las sesiones, siempre lucía tan imponente y sereno, tan seguro de sí mismo que intimidaba hasta la persona más ruda que pudiese existir sobre la tierra.

—¿Ya estás mejor, Dan? — se dirigió a mí en cuanto termino de hablar con Jaekyung.

—Ah, sí, mucho mejor... Solo un poco de dolor en la espalda baja.

—Ten cuidado, no cargues cosas pesadas y mejor déjale a Jaekyung el trabajo pesado.

—Por supuesto que yo hago el trabajo pesado, Dan solo disfruta— respondió de inmediato con una sonrisa traviesa de por medio.

Mis mejillas se calentaron, sacó por completo de contexto el tema, aunque si bien mí dolor sí era por su causa y por lo que insinuaba, no había necesidad de que lo revelara de esa forma tan descuidada, ¿no sentía vergüenza? El entrenador lo miro aun procesando lo que dijo —N-no le tome importancia, tendré más cuidado lo prometo.

—Muy bien, los dejó entonces, procura no excederte Jaekyung, aún no estas recuperado de tu hombro al cien por ciento.

—¿Aún sientes molestia en tu hombro? — pregunté al ya estar en casilleros.

—Casi nula, ese tiempo en que estuvimos distanciados me tomé varios descansos y lo ejercité como es debido.

—Ah, bueno, igual no te excedas— sonreí masajeando sus hombros —Te reprenderé si regresas a lo mismo.

Me observó desafiante y le regrese la misma mirada, sonrió divertido regresando a lo suyo —Está bien, no quiero hacerte enojar.

Sonreí victorioso, aunque vino algo a mi mente —Jaekyung...

—Dime— se giró vendando sus manos.

—Ahora que seremos padres, me preguntaba si tal vez esta sería la oportunidad para darlo a conocer al público... Sé que dije que te daría tiempo, pero ¿cuánto más?

Me miró desconcertado —Dan... — caminó con calma hacia mí, retrocedí un par de pasos, ahí iba de nuevo.

—¿Me dirás que aún no es tiempo?, Jaekyung tienes un enfrentamiento en un par de meses para entonces mi vientre ya estará más abultado, ¿pretendes que no asista?

—Dan... No lo mires de esa forma...

—¿Entonces cómo? Cada que te pregunto algo respecto a eso me das largas, que aún no es tiempo que aún lo sigues pensando...— tragué el sentimiento —Si no quieres hacerlo simplemente dímelo...

—Entiéndeme.

—Entiéndeme tú, yo lo hago y por ello te di tiempo, te ofrecí muchas alternativas... Escucha— me apoyé en la banca un mareo azotó mi cabeza, me estaba alterando demasiado.